Mientras los obreros siguen con la toma de la fábrica, el secretario general de la UOM a nivel nacional, Antonio Calo, anunció su intervención directa en el conflicto generado por el cierre de la autopartista rosarina de la empresa Mahle, de capitales alemanes, que implica la perdida de 560 puestos de trabajo directos. Caló recibirá este miércoles en Buenos Aires a los delegados de la planta ocupada, y también retomará el contacto con el ministro de Trabajo de la Nación, Carlos Tomada, con quien ya conversó sobre la situación de la fábrica de Perón al 5600.
“Me enteré por los diarios” del cierre de la planta, le dijo Caló al diario El Ciudadano, en claro tiro por elevación a los dirigentes de la seccional rosarina del gremio metalúrgico, a los que los obreros de Mahle acusan de no haberlos defendido como corresponde. Además, Caló dijo que el cierre de la fábrica “se puede revertir”.
Por su parte, el gobernador Hermes Binner solicitó formalmente una audiencia a la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, “con motivo de la preocupante situación planteada por el reciente anuncio de cierre de la autopartista Mahle, en la ciudad de Rosario”. El mandatario santafesino también pidió una entrevista con el embajador de la República Federal de Alemania en la Argentina, Günter Kniess.
Mediante una nota remitida a la titular del Poder Ejecutivo nacional, Binner solicitó “una audiencia para profundizar las soluciones y coordinar estrategias que generen en forma positiva y propositiva la superación de esta situación”.
Binner transmitió a la presidenta de la Nación la “entera disposición” del gobierno de la provincia de Santa Fe “para colaborar en todas las gestiones que sean necesarias para revertir esta situación”.
En tanto, en la nota dirigida al embajador alemán, Binner manifestó que el gobierno santafesino ve “con suma preocupación la situación que involucra a más de 500 trabajadores y sus familias” y manifestó su esperanza de que “el diálogo posibilite encontrar soluciones”.
