El gobernador Hermes Binner dejó inaugurado este viernes el 127º período de sesiones ordinarias de la Legislatura. El mensaje a ambas cámaras duró más de una hora y el mandatario repasó su gestión. Sin resignarse, insistió con la reforma constitucional.
“Tuvimos que transitar dificultades no menores, como el conflicto agropecuario, la histórica sequía y una crisis financiera internacional sin precedente”, sostuvo Binner en un tramo del discurso, aunque no precisó cuánto le costaron a la provincia esas variadas contingencias.
El mandatario santafesino recordó a “uno de los máximos defensores de su institucionalidad, el Dr. Raúl Ricardo Alfonsín”, habló de “valores que constituyen los signos inequívocos del progresismo”, y repitió 24 veces la palabra cambio. El resto fue un recorrido por las carteras de gobierno, en el que obviamente exaltó y defendió cada acción.
Como cada gobernador en estas instancias discursivas, Binner, y seguramente sus asesores, le otorga un lugar preponderante a las estadísticas, pero resultó un tanto desconcertante que, entre los habituales números y porcentuales presentes en toda revisión de gestión el ex intendente de Rosario recordara que “hasta la actualidad llevamos realizadas 75 reuniones de gabinete semanales”.
Binner volvió a reivindicar la reforma constitucional que surgió del Pacto de Olivos en 1994, y apoyado en ese bastón pretende encaminarse hacia una modificación de la carta magna provincial: “La reforma de la Constitución Nacional de 1994 introdujo modernas instituciones y consagró nuevos derechos y garantías que aún no se han plasmado en la Constitución de nuestra provincia. En ese marco, nosotros queremos reflejar la sociedad santafesina en una nueva Constitución. Debemos incluir temas trascendentes que ya han sido incorporados en la Constitución Nacional: la autonomía municipal, los mecanismos de democracia semidirecta, la descentralización y la participación”, pontificó, sin hacer caso a las voces que indican que al menos esos tres temas se pueden plasmar a través de leyes comunes y corrientes.
Críticas al por mayor
La oposición justicialista, en sus distintas vertientes, cayó sobre el mensaje de Binner con críticas en algún caso hilarantes. Es el caso del diputado Marcelo Gastaldi, quien montado en la constante repetición del vocablo cambio por parte del gobernador, chicaneó: “Es verdad, algo cambió en Santa Fe: ahora hay dengue”. El legislador rosarino no se quedó en la ironía y sintetizó: “(Binner) cree que éste es el mejor escenario para intentar convencer a la ciudadanía de que hay gestión, y que esa gestión es buena, y la verdad es que su gobierno aún no salió de la encerrona del diagnóstico permanente”.
Luis Rubeo, en tanto, también pivoteó alrededor de la excesiva referencia al cambio y reflexionó: “La ciudadanía no lo percibe”. Y sostuvo que “hay un hecho positivo para destacar, y tiene que ver con la baja en la mortalidad infantil y hay uno negativo, el énfasis puesto en una reforma constitucional que creo que no está en la agenda pública”.
A la vez, la senadora nacional reutemista Roxana Latorre expresó que en la administración Binner “hay una profundización de las políticas públicas de los gobiernos anteriores”, rescatando lo actuado en los dos mandatos de Carlos Reutemann y también, implícitamente, los de Jorge Obeid.
