El Ministerio de Desarrollo Social de la provincia reveló que en Rosario funcionaban de manera irregular 55 comedores comunitarios. La mayoría ya fueron dados de baja. Según comentaron desde la repartición, algunos de estos comedores no existían, otros no entregaban en tiempo y forma las raciones de comida, incluso vendían la mercadería; y en otros casos los lugares donde funcionaban no estaban en condiciones edilicias ni cumplían con las normas de higiene para alojar a los chicos.
Desde la cartera que comanda el ministro Pablo Farías promovieron, además, una investigación judicial que se sigue en el juzgado de Instrucción de la Primera Nominación a cargo de Roxana Bernardelli.
La auditoría comenzó a fines del año pasado y fue realizada en conjunto entre funcionarios del Ministerio de Desarrollo Social y la Sindicatura de la provincia de Santa Fe. Estuvo focalizada en distintos lugares de las zonas sur y oeste de la ciudad. En la última etapa de la investigación se detectaron estos 55 comedores “truchos”, donde el gobierno provincial enviaba, entre subsidios y mercaderías, alrededor de 300 mil pesos mensuales.
Según sostuvieron desde el ministerio, los recursos que dejaron de llegar a los comedores que fueron dados de baja “fueron redireccionados a otros centros comunitarios que venían solicitando un refuerzo en las partidas”. Además, Galdeano indicó que “se habilitaron nuevas copas de leche”.
