El Canalla arrancó ganando con gol de Caraglio pero enseguida sufrió dos baldazos de agua fría de Yacuzzi y Obolo y se fue al descanso perdiendo. En el complemento aumentó Sena y decoró el marcador Figueroa.
El Gigante era una fiesta pese a lo incómodo del horario elegido por AFA para disputar un encuentro de primera división en un día laborable y en pleno verano. Ante Colón se había mostrado una mejoría importante en lo futbolístico y se habían abierto las puertas del gol después de mucho tiempo. Por eso las grandes expectativas de los hinchas por ver por fin ganar a Central y poder gritar un par de goles en Arroyito.
El hecho de haber arriesgado como visitante y de haber superado a un rival como Colón, también encendía luces optimistas para los canallas. Y sobre todo, que la vuelta al gol hubiese llegado a través de Figueroa. Para alzar el ánimo del delantero que llegó como salvador y para contagiar a sus compañeros.
Y casi todo lo anterior pareció que se iba a conjugar en la tarde rosarina cuando de entrada nomás (corrían 10 de la primera mitad) Caraglio la mandó a aguardar y desató la algarabía canalla. Pero aunque comenzó como una de esas películas que todos adivinan, tendría un final feliz, el film terminaría siendo de terror.
En apenas 5 minutos Arsenal lo dio vuelta. Primero una exquisita jugada y una mejor definición de Yacuzzi, y enseguida el tanto de Obolo para tirar por el piso lo bueno hecho hasta allí y las ilusiones de los hinchas por lograr una cómoda victoria que lo empezase a alejar del fondo de las tablas.
En el complemento Central salió decidido a llevarse por delante a su rival pero se encontró con un planteo mezquino pero efectivo y chocó contra sus propias limitaciones ofensivas. Y, sobre todo, contra sus horrores defensivos.
El gol de Obolo terminó por sepultar los sueños canallas y el de Figueroa no hizo más que estirar la agonía. Central está hundido en lo más hondo de la tabla de posiciones y no puede salir a respirar en la de los promedios. Es verdad que, viendo la mitad del vaso llena, lo rescatable es que sus delanteros volvieron a gritar, pero lo concreto es que la posibilidad de ahogarse y perder la categoría están cada más cerca de convertirse en realidad que en pesadilla.
Síntesis
Rosario Central 2: Hernán Galíndez; Diego Chitzoff, Diego Braghieri, Nahuel Valentini y Santiago García; Milton Zárate, Mario Paglialunga y Gervasio Núñez; Emilio Zelaya, Luciano Figueroa y Milton Caraglio. DT: Ariel Cuffaro Russo.
Arsenal 3: Cristian Campestrini; Cristian Tula, Franco Peppino, Hugo Nervo y Federico Poggi; Hugo Nervo, Javier Yacuzzi, Sergio Sena y Iván Marcone; Iván Obolo y Luciano Leguizamón. DT: Jorge Burruchaga.
Goles: 10´ Caraglio (RC); 16´ Yacuzzi (A); 21´ Obolo (A); 51´ Sena (A) y 78´ Figueroa (RC)
Cambios en el segundo tiempo: Martín Ribero por Zárate (RC); Adrián de León por Chitzoff (RC); 32´ Facundo Silva por Leguizamón (A); Cristian Alvarez por Nervo (A); 39´ Nicolás Aguirre por Poggi (A)
Amonestados: C. Tula (A); M. Caraglio (RC); M. Zárate (RC); C. Campestrini (A); F. Silva (A)
Arbitro: Cristian Faraoni.
Cancha: Rosario Central