Educación, integración, defensa de la democracia, reparto de la riqueza e independencia fueron ejes de las conversaciones. Los países de Iberoamérica aprobaron este sábado por unanimidad la Declaración de Mar del Plata, la que refleja los pronunciamientos, propuestas y planes de acción que la comunidad adopta. La presidenta Cristina Fernández aseguró que "la cláusula democrática es una condición sine qua non para que esté presente en todos los instrumentos, organismos y encuentros nuestros, porque va al núcleo duro de la defensa de los procesos democráticos en nuestros países".
La presidenta Cristina Fernández puso este sábado en horas de la tarde a votación la aprobación de la Declaración de Mar del Plata la que incluye como propuesta sobresaliente la adopción de las “Metas Educativas 2021” con las cuales los países asientan su compromiso para hacer de la educación el instrumento privilegiado de inclusión social.
"Quiero saludar y felicitar a presidentes, jefas y jefes de Estado y a los cancilleres, por esta decisión de aprobar esta cláusula tan fundamental", subrayó Cristina en la sesión plenaria de la cumbre en Mar del Plata.
Cristina Fernández aseguró además que el presidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva y el ex mandatario argentino Néstor Kirchner “construyeron nuevos paradigmas” en sus países y en la región “con la recuperación de la autoestima y la dignidad de sus pueblos”.
La mandataria argentina tomó la palabra en la sesión plenaria de la XX Cumbre Iberoamericana que se desarrolla en Mar del Plata para rendir homenaje al presidente brasileño que dejará el cargo el 1 de enero en manos de su sucesora Dilma Rousseff, la primera presidenta que gobernará aquel país sudamericano.
“Nadie lo va a despedir hoy”, dijo Fernández de Kirchner a Lula, al considerar que “un militante político nunca se va de la política y mucho menos cuando tuvo el más alto honor de desempeñar la tarea de transformar su país”.
