Se hallaron más de 30 toneladas de cobre en un depósito de Fisherton.
Se hallaron más de 30 toneladas de cobre en un depósito de Fisherton.

Un empresario metalúrgico de Rosario cayó por un millonario robo de cables a la EPE. Fue detenido por agentes de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) como presunto líder de una banda que robó unas 30 toneladas de cables eléctricos a la EPE.

El hombre, dueño de una tradicional empresa dedicada a la reducción de chatarra en el barrio de Fisherton, era buscado desde entonces por la policía con un pedido de captura emitido por el juez de Instrucción 1ª de la capital provincial, José Luis Pegassano, quien entiende que el comerciante podría ser no sólo autor de robos calificados sino también el líder de una asociación ilícita dedicada a la materia.

El 8 de febrero de 2006, la TOE realizó un allanamiento en la chatarrería de Colombia y Brassey, en la zona oeste de la ciudad, y allí secuestró 12.600 kilos de cobre y 18.300 kilos de aluminio correspondientes a cables de media y alta tensión sustraídos a la EPE en los cuatro años anteriores.

A ese procedimiento lo habían precedido otros dos que se realizaron en la capital provincial en el marco de una investigación que se había iniciado en la localidad de Sauce Viejo por personal de la comisaría 19ª de la Unidad Regional I. En total, el secuestro de materiales sumó unos 50 mil kilos de cables reducidos.

Cifras importantes. En aquel momento, las autoridades de la EPE sostuvieron que reponer esos materiales más la mano de obra que demandaba el trabajo, insumiría a la empresa una inversión de más de 2 millones de pesos, pero que esos cables vendidos como chatarra sólo permitirían recuperar unos 600 mil pesos.

Y también comentaron que la mercadería hallada en la chatarrería de Rosario habría sido trasladada desde la capital provincial y sus alrededores para ser reducida aquí. Entonces, una vez más, los cables reducidos tuvieron que ser cargados en camiones para ser devueltos a un galpón santafesino donde quedaron bajo la protección de la Justicia. Fueron cinco rodados con semirremolques los que se usaron para recorrer la autopista con el millonario botín.

En una primera instancia, y por orden del ex juez de Instrucción santafesino, José Manuel García Porta, fueron detenidas seis personas, cuatro de las cuales fueron condenadas por sus distintos grados de participación en los delitos imputados. Pero en la chatarrería de Fisherton no se encontró a persona alguna cuando se realizó el allanamiento y la presunta cabeza de la organización, el empresario rosarino dueño de esa chatarrería, desapreció para la vista de los pesquisas.

Sin embargo, la TOE siguió investigando el caso y ahora, a seis años de aquellos procedimientos, Carlos Alberto S. fue detenido y deberá dar cuenta ante la Justicia acerca de su dudoso accionar.

Fuente: La Capital
Más notas relacionadas
Más por Admin
Más en Ciudad

Dejá un comentario

Sugerencia

Un rompecabezas incompleto

Para recomponer el actual modelo de representatividad faltan piezas clave. Empresarios, Ju