En Arroyo Seco, un hombre se echó encima todo el alcohol que encontró a su paso, se incendió, y luego abrazó a su esposa. Él está internado, en estado reservado, con el 35 por ciento del cuerpo quemado. Ella busca abogado.
El violento intento de emular a los clásicos bonzos por parte del furibundo consorte sucedió este domingo a la tarde en la casa ubicada en Alejandro Gómez al 1300 de la vecina localidad. Allí, Eleuterio G., de 52 años, pretendió dar por terminadas una reyerta con su pareja, María Cristina R, de la misma edad, embebiendo todo su cuerpo con alcohol de uso familiar.
Fuera de sí, a los gritos, el desorejado marido mostró a su mujer cómo se dirigía a la cocina, de cuya mesada tomó una caja grande de fósforos “Dos Patitos”, extrajo una cerilla y retornó al living, donde prendió fuego a un colchón y a sí mismo, en medio de más y más alaridos.
Por último, el desquiciado abrazó a su esposa, que rápidamente se vio envuelta por las llamas, pero zafó de la trágica trampa.
Algunos vecinos avisaron a la comisaría del lugar y a una ambulancia, que trasladó a la pareja al hospital zonal de Arroyo Seco. Eleuterio, quemado en el 35 por ciento de su cuerpo, fue trasladado posteriormente al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) y la mujer fue dada de alta.
