Cuatro ex participantes de la comisión directiva de la institución de Arroyito y el ex abogado del club, quedaron muy comprometidos por irregularidades admnistrativas. Los imputados formaron parte de la gestión que comandó el cuestionado Pablo Scarabino.
En el palacio de Tribunales de Rosario, se produjo este jueves la ampliación en los procesamientos que se llevan a cabo a ex dirigentes de Rosario Central durante la gestión de Pablo Scarabino. Estas personas estan imputadas por malversación de fondos y turbias maniobras financieras que tenían como fin “extraer dinero que correspondía al club (…). Dichos ardiles lograron engañar a la magistrada (Liliana Giorgetti) interviniente en el concurso preventivo". Esto se desprende de la resolución firmada por el Juez de Instrucción Nº3, Luis María Caterina.
Los procesados son: el ex secretario Gonzalo Estévez, el ex vicepresidente segundo Juan Dalbes, el ex tesorero Mauricio Salvo, el ex vicepresidente primero Marcelo Gastaldi y el ex abogado de la institución, que pratocinó a la entidad en la convocatoria de acreedores, Juan José Ubieta.
Los imputados además están procesados por malversación de fondos respecto al dinero ingresado a las arcas canallas por las ventas del arquero Juan Ojeda, el defensor Cristian Villagra y el delantero Marco Ruben a River Plate por un monto aproximado a los ocho millones de dólares.
De acuerdo a la resolución del Juez, a Gonzalo Estévez se lo imputa de “haber tenido participación en el desapoderamiento de sumas de dinero al club, en beneficio propio y/o de terceros, violando sus deberes en su carácter de directivo de la institución”. Tras varias pericias contables que acompañan el expediente pudo comprobarse que Estévez hacía figurar pagos a acreedores ficticios o que ya se habían realizado con otros fondos.
La misma imputación cae sobre Salvo, Dalbes, Gastaldi, quienes se presume participaron de las maniobras de extracción de dinero no destinado para gastos del club, pago de la misma deuda en dos oportunidades, toma de préstamos que no ingresaron a la tesorería de la entidad y saldo a acreedores ficticios. Las maniobras investigadas también comprenden el período de gestión que fue de 2004 a 2007.
Respecto a la situación Ubieta, el juez lo imputa por "haber tenido participación en el desapoderamiento de sumas de dinero al club en ejercicio de sus funciones de abogado de la institución, en beneficio propio o de terceros violando sus deberes”.
En su defensa, todos los imputados negaron los cargos pero ayer el magistrado Caterina resolvió ampliar los procesamientos y esto provoca la profundización de las investigaciones sobre el inicio del desfalco que fue el inicio de la patética situación que vive en la actualidad el club Rosario Central.
Fuente: Rosario 12
