Binner se siente fuerte y espera para tomar una determinación.
Binner se siente fuerte y espera para tomar una determinación.

Hermes Binner aseguró este lunes que su corriente política “no está desesperada por ocupar un lugar” en las elecciones presidenciales del próximo 23 de octubre, lo cual aumenta la ansiedad ya elevada de Ricardo Alfonsín, quien hace dos semanas dejó de fumar. Para el gobernador santafesino, el triunfo de su delfín Antonio Bonfatti fue “una prueba de confianza”. Posicionado y ya en carrera rumbo a la Casa Rosada, el líder socialista afronta ahora la decisión de ir detrás de los radicales o encabezar una fuerza de centroizquierda con Proyecto Sur, el GEN y el Frente Cívico del cordobés Luis Juez.

Binner sostuvo este lunes que el triunfo logrado un día antes por su candidato Antonio Bonfatti en las primarias santafesinas, “es una prueba de confianza” hacia su sector en la interna del PS y aseguró: “No estamos desesperados por ocupar un lugar”, en las elecciones presidenciales de octubre próximo.

El domingo, Binner volvió a transformarse en el gran ganador de la jornada electoral, al conseguir que su ministro de Gobierno, que había iniciado la campaña con apenas un 7 por ciento de intención de votos, fuera el precandidato más votado en la interna del oficialismo.

Igual mérito había logrado hace dos años cuando hizo lo mismo con Rubén Giustiniani, que denostado ahora por el gobernador, quedó tercero en la primaria del Frente Progresista detrás el radical Mario Barletta.

“Cuando la gente ve que las promesas se trasladan a la realidad, nos reafirma su confianza”, señaló en alusión al triunfo logrado por Bonfatti, y destacó que ese respaldo de los votantes “es un gran respaldo para que nuestra voz sea creíble en Santa Fe”.

El gobernador se manifestó muy contento por los comicios del domingo, ante la “maravillosa experiencia” del estreno de la boleta única en la provincia de Santa Fe para las elecciones primarias, porque “habla del alto grado de democracia que estamos viviendo en nuestra provincia”.

Binner descartó la posibilidad de una interna con el radical Ricardo Alfonsín para dirimir la conformación de la fórmula presidencial del Frente Progresista que integran ambas corrientes.

“No es una cuestión que se pueda definir a nivel personal, sino de acuerdo a la integración de los referentes partidarios que puedan lograr avances”, puntualizó, y advirtió que desde el socialismo, “estamos trabajando en generar una corriente que no está desesperada por lograr un lugar sino contribuir para transformar la realidad”.

“Estamos convencidos que es necesario conformar una fuerte presencia de sectores políticos y sociales que no son una oposición franca al gobierno (nacional) en una cuestión de vida o muerte, sino que ofrecen perfiles y propuestas que permitan aprovechar la bonanza económica”, finalizó Binner.

Las palabras repiquetearon en la cabeza Alfonsín, quien aguarda con desesperación una definición de Binner, menos apurado que su amigo radical.

Los que también esperan al gobernador santafesino son Proyecto Sur y el GEN, quienes desean que encabece una fórmula presidencial de centroizquierda.

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