El endeudamiento para obra pública se tratará por separado, en agosto.

El Senado le otorgó media sanción a la Reforma Tributaria enviada por el Ejecutivo, aunque con amplias modificaciones: no habrá aplicación de ingresos brutos a grandes empresas ni revalúo urbano, y el rural será varias veces inferior a lo propuesto inicialmente. El gobierno quería recaudar 1.500 millones de pesos, pero sólo llegaría a 900.

El revalúo fiscal rural será del 70 por ciento en lugar del 400 por ciento progresivo durante seis años que pretendía el gobierno, y no habrá revalúo urbano, sino que éste se calculará en ocho tramos: los dos primeros con subas del 20 por ciento, del 3 a 6 del 30 por ciento, mientras que en los dos tramos superiores se incrementarán en un 65 por ciento. El Ejecutivo planteaba un aumento del 100 por ciento.

En cuanto al Inmobiliario Rural, habrá subas progresivas de entre el 50 y el 200 por ciento, también por debajo de la propuesta oficial.

También se acordó aplicar Ingresos Brutos a la construcción –como había pedido el gobierno– con alícuotas diferenciales según el origen de las empresas y sin piso mínimo de facturación: para las constructoras santafesinas, la alícuota será del 1 por ciento; para las extra provinciales del 1,5.

La industria seguirá exenta de Ingresos Brutos, pero habrá alícuotas diferenciales para las empresas comerciales y de servicios –y también para el sector financiero– según su origen. Las alícuotas diferenciales por facturación –que intentó aplicar el Ejecutivo mediante el decreto 200– también fueron eliminadas del texto votado anoche.

Respecto del endeudamiento por 400 millones de dólares, los legisladores se comprometieron a tratarlo en agosto, luego del receso parlamentario que comenzó este viernes.

La reforma comenzará a regir al mes siguiente de que sea promulgada la ley, previo paso por Diputados, donde según adelantó su presidente, el diputado del PJ Luis Rubeo, tendrá lugar un “profundo debate”.

«Queremos analizar la letra fría en el despacho y sobre todo qué impacto tiene en el inmobiliario urbano, porque las grandes ciudades vienen soportando aumentos de tasas de energía, de agua y de transporte urbano de pasajeros», apuntó legislador este viernes, en declaraciones a Lt8.

Y anticipó que «así como se llevo un tiempo prudencial en la Cámara de Senadores, creemos que en la de Diputados se va a dar un debate bastante profundo».

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