El río Paraná alcanzó en la costa de la ciudad de Santa Fe 5,43 metros y produjo hasta ahora la evacuación de 25 familias, que se elevan en toda la provincia a 37. La situación en Rosario es “controlable”.
Este martes continuó subiendo el Paraná en las costas de la capital provincial lo que provocó superar el nivel de alerta establecido en 5,30.
Desde el Centro de Informaciones Meteorológicas de la Facultad de Ciencias Hídricas de la Universidad Nacional del Litoral indicaron que el agua creció 1 centímetro en las últimas 24 horas.
En su último informe, el Instituto Nacional del Agua (INA) estimó que el pico del río Paraná será de 5,45 metros en la capital provincial, lo que se producirá el 31 de este mes.
Por el momento son 25 las familias evacuadas de la zona costera este de la ciudad, 19 de la Vuelta del Paraguayo y 6 de Colastiné Sur.
En toda la provincia son 37 las familias que tuvieron que dejar su hogar: 25 en Santa Fe, 5 en San Javier, 2 en San José del Rincón, 2 en Arroyo Leyes, 1 en Santa Rosa de Calchines, más las 2 familias evacuadas por las lluvias en Villa Constitución.
Los damnificados de la capital provincial se encuentran alojados en los refugios construidos por el municipio, y se les brinda asistencia social, atención médica y provisión de agua y alimentos.
“Si no hay cambios en las condiciones climáticas, esta semana llegaría el pico», afirmó la secretaria de Comunicación del Gobierno de la ciudad, Andrea Valsagna, y aclaró que «de todas maneras, durante julio se mantendría por arriba de los 5 metros”.
Por último, señaló que desde su área continuarán “trabajando fuertemente, supervisando el estado de las defensas y el funcionamiento de las estaciones de bombeo”, y destacó que “lo importante es estar cada vez más preparado para estas situaciones y tener la mejor información posible”.
En tanto, en Rosario la situación es distinta ya que el cause del río esta en 4,82 metros, por debajo de la medición de alerta, según informaron desde el centro de Operaciones de Emergencias de la Municipalidad.
Por su parte, el titular de Defensa Civil, Raúl Rainone, consideró en declaraciones a La Capital que “la situación es controlable, aunque no tenemos estimación de cuánto va a seguir creciendo el río».
“La zona más comprometida en la ciudad sería la del Mangrullo, pero desde hace varias semanas se vienen realizando trabajos, como la provisión de bolsas de arena para evitar que en caso de crecida se inunden las partes traseras de las viviendas», sostuvo el funcionario local.
