La final entre Central y Boca se sigue jugando en las repercusiones por la mala actuación de Diego Ceballos, quien tras admitir los errores fue sancionado por la AFA. El mundo del fútbol cargó contra el referí, que no fue defendido ni por su sindicato. Dirigentes canayas piden volver a jugar el partido.
El árbitro, de pésima actuación en la final de la Copa Argentina que Boca le ganó a Central por 2-0 en Córdoba, admitió este jueves que se equivocó, pidió disculpas por sus errores y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) lo sancionó al retirarlo del partido entre Lanús y Sarmiento de Junín, que debía dirigir este viernes por la última fecha del torneo local.
«Soy un ser humano y me equivoqué. Luego del partido, miré las imágenes por TV y me di cuenta que no fue penal, así que pido disculpas a quien corresponda», admitió el hombre de negro vestido de naranja.
Las protestas hacia el juez no terminó en el campo de juego con los jugadores y cuerpo técnico auriazul, sino que mientras aguardaba su equipaje en la cinta del Aeroparque Metropolitano, fue escrachado por una mujer, quien lo acusó de hacer un trabajo vergonzoso y le deseó que no dirija nunca más.
Por otra parte, el director de Arbitraje de la AFA, Miguel Scime, admitió que Ceballos «no tuvo decisiones felices en algunas jugadas puntuales» de la final en Córdoba y especuló que «se debe sentir como los simpatizantes de Rosario Central».
Por su mal desempeño, Ceballos ni siquiera recibió el apoyo gremial. «No está capacitado para jugar partidos tan importantes», señaló el titular del Sindicato de Árbitros de la República Argentina, Guillermo Marconi.
Pero Scime relativizó la designación y aseguró que «no creo que Ceballos no haya sido el indicado. Lo que creo es que hubo tres jugadas de las cuales en una acertó el cuerpo arbitral y en las otras dos, lamentablemente, se equivocó, como se equivocan en todos los partidos de los fines de semana. Si estos errores ocurren en otro tipo de encuentros no tienen tanta repercusión”.
Consultado acerca de los motivos por los cuales Ceballos fue designado, Scime explicó que “hay un reglamento que se cumple a rajatabla. Ningún árbitro puede repetir un equipo hasta que no pasen dos fechas. Entonces trasladen: dos árbitros que dirigieron a Boca en las últimas fechas del torneo, más los dos que dirigieron a Central, más los dos que los dirigieron en los últimos partidos de la Copa, más tres árbitros que están lesionados».
«A eso le sumamos la fecha próxima cuyos árbitros ya están designados y los tres árbitros que son rosarinos: (Sergio) Pezzotta, (Saúl) Laverni y (Pablo) Díaz. Eso nos da: 14 árbitros. Tenemos un plantel de 19 árbitros, los cuatro restantes consideramos que no estaban en condiciones de dirigir por ser tan jóvenes”, concluyó.
Misión casi imposible
Los antecedentes no son esperanzadores, pero Central hará el intento. Todavía molestos por lo ocurrido en Ćordoba, los dirigentes canayas no se conforman con la sanción al árbitro, sino que pretenden jugar nuevamente la final.
«No conforma a nadie que se pare a Ceballos porque después queda todo en el olvido. Tiene que haber decisiones significativas para que esto no vuelva a suceder», expresó en Radio2 el vicepresidente primero del club, Luciano Ceffarati, y adelantó que este viernes pedirán que «vuelva a jugarse porque el fútbol argentino debe ponerle fin a la impunidad».
