“Claramente deberían tener angustia de tomar la decisión, querido rey, de separarse de España”, dijo el presidente Mauricio Macri en alusión a los hombres que firmaron la declaración de la Independencia. Fue este sábado en el marco de la celebración oficial por el Bicentenario de la ruptura formal de los lazos coloniales. Antes, junto a los gobernadores el mandatario firmó un «Compromiso para el Tercer Siglo de los Argentinos».
Al pronunciar su discurso, ante el rey Juan Carlos de España, desde la casa de Tucumán, el jefe de Estado expresó que «este lugar, esta casa es histórica porque acá es donde empezó la historia y un conjunto de ciudadanos se animaron a soñar». Agregó que Argentina es «un pueblo independiente y libre, y depende de nosotros que marquemos el rumbo» y destacó que «el mundo se ha interesado en nosotros y nos quiere acompañar».
Macri le dice al «Querido Rey» que los Patriotas deben haber sentido Angustia de independizarse. Siento Vergüenza. pic.twitter.com/ksWjKmJZij
— Hugo Yasky (@HugoYasky) 9 de julio de 2016
En otra frase que despertó polémica en las redes sociales y que le valió respuestas de diferentes referentes sindicales, Macri se refirió al ausentismo docente y pidió a los maestros que «puedan aceptar que tienen que evaluarse sistemáticamente».
El presidente hizo alusión también a la situación desatada por los tarifazos decretados por el gobierno, que las últimas horas le valieron un revés judicial, y justificó la fenomenal suba de por las “malas políticas instrumentadas por el gobierno anterior”.
En un breve discurso en el que todo el tiempo sobrevoló sobre la idea del esfuerzo personal e individual, el mandatario vinculó la idea de la independencia con la «responsabilidad» que implica «ser independientes» y la «solidaridad» que caracteriza a los argentinos para luego -en una increíble y casi perversa pirueta retórica- llamar a «consumir la menor cantidad de energía posible».
Macri pidió a los argentinos «ser protagonistas» como lo fueron los congresales de 1816 cuando firmaron el acta de Independencia, y «no tener miedo» ni «escuchar a los que se han enfermado con el poder», para ir «hacia un futuro mejor, con otros valores, basados en el trabajo, el esfuerzo personal y el diálogo».
«La verdad es dura. Todas las transiciones son difíciles, pero este punto de partida fue especialmente difícil porque encontramos un país y un Estado realmente muy castigado por la mentira y la corrupción», expresó.
Además señaló que «siete meses no es nada a los 200 años», pero dijo estar «convencido» que los argentinos han «aprendido a escuchar más, a dialogar más» y han «emprendido el camino del progreso».
El jefe de Estado consideró que «vamos por el camino correcto» y manifestó que «vamos rumbo a un increíble futuro».
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