En la previa al choque ante Independiente en el Coloso, Newell’s tiene problemas por todos lados. A la huelga de los empleados por despidos, se le sumó el malestar del plantel por falta de pago. ¿Peligra el partido del domingo?
El club del Parque Independencia no atraviesa su mejor momento, y a excepción de su posición en la tabla (es el único escolta del líder Boca), va de conflicto en conflicto.
La semana comenzó con el paro de los empleados nucleados en Utedyc, a raíz de tres despidos. Y este miércoles, los futbolistas entrenaron sin la ropa oficial a modo de protesta, porque no pudieron depositar los cheques para cobrar sus sueldos.
«Los jugadores están preocupados por la situación porque ya habían hecho un acuerdo con los dirigentes y Agremiados, que no cumplieron. La semana pasada cobraron enero, pero hoy llamaron a los referentes para pedirles que no presentaran los cheques porque no tenían fondos para pagarlos», contó a Télam un vocero cercano al plantel.
Ante un nuevo inclumplimiento de la dirigencia, el plantel rojinegro volvería a practicar vestido de civil este jueves, a la espera de novedades sobre el choque ante el Rojo, que los empleados del club pusieron en duda si no solucionan su situación.
El delegado de Utedyc en Newell’s, Mauro Litrenta, afirmó al respecto que de no solucionarse el conflicto antes del domingo “se pone en riesgo el partido, porque sin el servicio de los trabajadores no se puede jugar”.
Ante las versiones dirigenciales que aseguran que el encuentro se puede disputar igual, Litrenta explicó que “el estadio puede abrir sólo con trabajadores que estén en relación de dependencia con el establecimiento, porque sino no estarían cubiertos por la ART, ni por ningún seguro”, y aclaró que “los colaboradores pueden estar en cuestiones mínimas y básicas, pero no pueden montar un espectáculo al que asisten 40 mil personas, porque ante cualquier cosa que se te vaya de las manos, corren riesgo los espectadores”.
