“Un hermano de la comunidad lof en Resistencia Cushamen está desaparecido luego que en la tarde atacaron al puesto que se levanta sobre la ruta 40. Vieron al hermano cuando lo subieron a una camioneta, pero no está detenido”, indicó la noche de este martes un vocero de la comunidad que recuperó tierras ancestrales a la multinacional Benetton en el departamento Cushamen, Vuelta del Rio, Leleque, Chubut.

En otro ataque sistemático al lof, “unos cien gendarmes atacaron el puesto de la comunidad sobre la ruta, y se internaron para destruir las viviendas de las familias, maltrataron a cinco mujeres y las encerraron con los niños en una casita, donde los tuvieron unas tres horas. Mientras rompieron todo y quemaron ropas, colchones, libros y se llevaron herramientas de trabajo”, indicó desde el territorio un vocero de la comunidad.

“Además –agregó-, cortaron los accesos y no dejaron pasar a ambulancias y miembros de organismos de Derechos Humanos, quienes quedaron en los bloqueos de ruta de Gendarmería para estar atento a lo que sucedía. Frente al puesto, quedaron dos camionetas de gendarmerías y un camión blindado tipo Unimog.

“Al principio se resistió el ataque, pero avanzaron y algunos pudieron refugiarse internándose en el campo”, contaron. También señalaron que la lamuen (hermana) Soraya Maicoño se encuentra retenida sobre ruta Nacional 40, frente la comisaria de Leleque. Pero, los accesos a la comunidad estan siendo cortados y esto dificulta la comunicación certera”.

Mientras los hechos fueron difundidos por radios comunitarias como Petu moguelein (Aún vivimos), Fogón y Alas, los medios comerciales callaron, en su domestizaje ante el oficialismo y fuerzas de seguridad.

Represión en Bariloche

En tanto, el lunes 31, la represión fue en frente de las oficinas del Juzgado Federal de Bariloche. Un miembro de la comunidad indicó a este medio: «Se ingresó de manera pacífica. Estábamos reunidos con nuestros abogados y charlando con el fiscal, cuando empezamos a escuchar que se estaban produciendo incidentes del lado de afuera. Se oyeron disparos y roturas de vidrios”, indican desde la sureña ciudad, voceros de los mapuches que exigían la libertad de Facundo Jones Huala, lonko weichafe (representantes del pueblo mapuche y militante “con energía o newen”, por esa causa).

El martes, desde Bariloche, fuentes de los mapuches, indicaban que ya eran 9 los detenidos (6 en una unidad aeropuertaria, 3 en el escuadrón 34 de Gendarmería y que una de las dos mujeres golpeadas está con un labio muy lastimado y perdió dos dientes. En tanto, Facundo sigue en la unidad 36 de la Penitenciaría Federal de Esquel, y anoche comenzó una huelga de hambre que “mantendrá hasta que cambie la situación”, señalaron sus hermanos.

Por su parte, la APDH denunció “la profundización de la persecución política al pueblo mapuche, lo que se manifiesta en el mantenimiento en prisión de Facundo Jones Huala más allá del plazo de la detención preventiva dictada por el Juzgado federal de Bariloche. A esto se añade la feroz represión desatada por fuerzas de la policía federal, gendarmería y policía aeroportuaria, en ocasión de manifestaciones realizadas por la comunidad mapuche y otras organizaciones sociales en las ciudades de Esquel y Bariloche los días 29 y 31 de julio”.

Juicio y liberación

El mapuche de 31 años, del Lof Cushamen (Chubut) fue encarcelado el último 28 de junio acusado por “terrorismo, incendios, robos, amenazas” y las muy supuestas declaraciones de guerra a Argentina y Chile. Pero ya, en 2016, tras un juicio por pedido de extradición a Chile, luego declarado nulo por irregularidades y torturas a testigos, la causa pasó a la Corte Suprema y lo liberaron porque esos cargos fueron apelados.

Pero la persecución siguió y se intensificó desde sectores tribunalicios, gubernamentales y de la prensa hegemónica. Habría que recordar que el mismo día en que fue detenido Facundo, se reunieron y trataron el tema Bachelet y Macri. En el pedido de captura internacional que realizó el gobierno chileno, Facundo es acusado por participar en 2013 de un ataque incendiario contra la casa de los cuidadores de un campo cercano a la ciudad de Valdivia. Fue detenido, pero luego lo liberaron”.

Dicen incidentes, no represión

Este lunes, ante el violento accionar armado, el Periódico de Bariloche, indicaba: “Incidentes y corridas en el Juzgado Federal de Bariloche”. Indicaban que “las fuerzas de seguridad desalojaron a los líderes mapuches que cortaron media calzada de San Martín. Detuvieron a dos mujeres. Analizan la situación procesal de Facundo Jones Huala”.

Sobre el operativo intentaban explicar que “Un equipo antidisturbios dispersó a quienes se manifestaban por la liberación del lonko. Los disparos de las postas de goma retumbaron entre los edificios de la calle San Martín y se vivieron momentos de tensión tras la detención de dos mujeres que participaban de la protesta”.

Por su parte, desde la comunidad señalaban que “la mañana comenzó con banderas y cánticos en la vereda del Juzgado Federal. A un mes de la detención de Huala, los representantes de distintas comunidades mapuches llegaron a Bariloche para pedir que el juez Ricardo Villanueva defina el futuro del líder mapuche”.

Sin garantías constitucionales

Para Marina Schifrin, abogada de Facundo, en el juzgado federal de Bariloche no hay garantías constitucionales». Y para la APDH, «el Juez Federal Villanueva, tras detener a Huala a fines de junio lo envió a prisión por un mes a territorio de su colega en Esquel y aún no emite opinión sobre su liberación, que debiera haberse efectuado según su resolución, el 31 de julio reciente».

Pero la Corte Suprema de la Nación, ante quien la Fiscal Federal de Esquel apeló el fallo que dio la libertad a Facundo, en los primeros días de agosto del 2016, aún no se pronuncia.

Por eso la APDH sostiene que “se crea un peligroso lapsus legal, una virtual zona de nadie, en la que ningún estamento judicial, provincial o federal se responsabiliza del prisionero y castiga a su comunidad por demandar se haga justicia».

Más notas relacionadas
Más por Alfredo Montenegro
Más en País

Dejá un comentario

Sugerencia

Como en “El cuento de la criada”, para denunciar la violencia de género

“Milei, Pullaro y Javkin nos quieren como criadas. No lo vamos a permitir”, decían los car