En el duelo de Academias del próximo domingo, a las 13.15 en Arroyito, Rosario Central es el que necesita imperiosamente un buen resultado. Tras la dura derrota ante River, crecieron los rumores sobre un posible cambio de DT.
Central jugó mal ante el conjunto millonario en Núñez, en la fecha anterior, y algunos medios se apuraron a hablar de reuniones de la dirigencia con otro entrenador. Generalmente, cuando estas cosas suceden, es porque alguien cercano a la comisión directiva quiere que se ponga en duda la continuidad del técnico que está trabajando. Si a eso se le suma que por la tarde de este martes, en la vuelta a los entrenamientos, varios de los principales popes auriazules (el presidente Raúl Broglia y los vicepresidentes Ricardo Carloni y Luciano Cefaratti) se acercaron a charlar con Leo Fernández en el predio de Arroyo Seco y antes del inicio de la práctica, la cosa empieza a tomar otro color. Sin embargo, según los números que maneja el periodista Carlos Durhand, un experto en estadísticas y sobre todo del club de Arroyito, la campaña no es para nada pobre: desde que Fernández asumió, allá por la 9na fecha, acumuló 27 unidades, que no son poca cosa si se tiene en cuenta que desde entonces, sólo 3 equipos sumaron más puntos: Godoy Cruz (33); Independiente (30) y San Lorenzo (28).
Lo cierto es que a la vuelta de la esquina está el partido con el Racing del Chacho Coudet, que seguramente será bien recibido en el Gigante, y que Leo deberá cosechar un buen resultado para ahuyentar, al menos por ahora, esos rumores y para mantener vivas las posibilidades matemáticas de ingresar a la próxima edición de la Copa Sudamericana. Para el juego ante los de Avellaneda, el ex DT de la reserva canaya no podrá contar con el defensor colombiano Óscar Cabezas, que tendrá 3 semanas de recuperación por el desgarro que sufrió en el Monumental, pero podrá recuperar varias piezas valiosas.
El regreso de Leonardo Gil es una fija y también hay muchas chances de que Maximiliano González vuelva a ser titular. En ese caso, Mauricio Martínez taparía el hueco de Cabezas en el fondo y González ingresaría en la mitad de la cancha. Y a la pregunta que se hace todo el pueblo auriazul, sobre el estado de Néstor Ortigoza, que llegó como la gran incorporación y prácticamente no pudo jugar, es muy probable que ocupe un lugar en el banco de suplentes y pueda, si es que el trámite del partido se lo permite, sumar algunos minutos en cancha.
Otras incógnitas a despejar son la continuidad de Paulo Ferrari o la vuelta en el lateral derecho del pibe Nahuel Gómez, y quién se ubicará como volante por izuierda: si José Luis Fernández, de flojo rendimiento ante el Millo, o Federico Carrizo.
Y por supuesto qué ocurrirá en el flanco de ataque donde Maximiliano Lovera y Marco Ruben pelean cabeza a cabeza para acompañar a Fernando Zampedri.
