El conjunto auriazul cayó 1 a 0 ante Defensa y Justicia en el Gigante de Arroyito, en el cierre de la 5ta fecha de la Superliga, en la que acumula su segunda caída al hilo. Lisandro Martínez, en el complemento, marcó el único gol.
Rosario Central volvió a jugar mal, pero ahora su flojo desempeño no puede disimularse con el resultado. Ante su público, los dirigidos por Edgardo Bauza repitieron la fórmula de las jornadas anteriores, pero el flojo desempeño les volvió a dar una cachetada de realidad.
El Canaya no tuvo ideas en todo el partido, y su mejor y casi única arma para convertir, como lo es el juego aéreo, no le funcionó. Los de Florencio Varela, que no hacen distinción de localías, lo fueron a buscar en todo momento, y con el grito del ex Newell’s a los 28’ del segundo tiempo, justificaron lo que se observó en el verde césped.
En el primer tiempo se estudiaron y aburrieron. No pasó nada, a excepción de un remate de Nicolás Fernández a minutos del descanso, que Jeremías Ledesma resolvió con una buena estirada. Un instante antes, el dueño de casa había perdido por lesión a Óscar Cabeza, por lo que el Patón debió echar mano al banco con el ingreso de Miguel Barbieri.
Para torcer el rumbo del encuentro, el entrenador mandó a la cancha a los pibes Andrés Lioi y Maximiliano Lovera, pero no hubo caso. La dupla de ataque conformada por Fernando Zampedri y Marco Ruben no se complementa, y no generan miedo alguno salvo en el juego aéreo. Para colmo, uno de los puntos altos de Central en lo que va del torneo local, como el arquero Ledesma, se quedó corto en la salida y pagó el error con un gol en contra.
Los de Arroyito juegan mal, tal como ocurría cuando ganaba. Cada equipo que lo atacó, le generó un problema importante, y todo indica que el equipo que sale de memoria, comenzó a exhibir aún más sus fallas.
