El clásico de la ciudad, correspondiente a los cuartos de final de la Copa Argentina, comenzará desde las 15.30 –en el Viaducto y sin público– bajo el arbitraje de Patricio Loustau y la televisación de TyC Sports.

Rosario ya palpita el cruce entre los rivales de toda la vida. Con las puertas cerradas del estadio de Arsenal, leprosos y canayas coparán los bares de la ciudad, casas de amigos y familiares, y por qué no en soledad, para seguir las alternativas del encuentro en el que uno avanzará, dejando al otro en el camino.

Por el lado de Newell’s, el entrenador Omar De Felippe no confirmó la formación, aunque la única duda pasa por conocer si el acompañante en la zaga de Fabricio Fontanini será Teodoro Paredes o Stéfano Callegari.

En la vereda de enfrente, Edgardo Bauza también tenía dudas con respecto a la alineación, sobre todo porque varios jugadores llegan al límite desde lo físico. Todo indica que Matías Caruzzo estará desde el arranque al igual que Fernando Zampedri. Distinta suerte corrieron Óscar Cabezas y Maximiliano Lovera.

Así, la probable formación rojinegra estará compuesta por Alan Aguerre; Facundo Nadalín, Callegari o Paredes, Fontanini y Mariano Bíttolo; Hernán Bernardello y Braian Rivero; Joel Amoroso, Mauro Formica y Héctor Fertoli; Luis Leal.

Por su parte, los que saltarían a la cancha por el lado auriazul serían: Jeremías Ledesma; Gonzalo Bettini, Caruzzo, Marcelo Ortiz y Alfonso Parot; Washington Camacho, Leonardo Gil, Néstor Ortigoza y Federico Carrizo; Germán Herrera y Zampedri.

El ganador de esta llave jugará en la próxima instancia ante el sorpresivo Temperley, que eliminó a San Lorenzo y lo dejó sin entrenador tras la renuncia del Pampa Claudio Biaggio. De todas maneras, más allá de las aspiraciones que uno y otro puedan tener en este certamen federal, hoy lo primordial es adueñarse de la alegría de la ciudad.

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