Los defensores del Pueblo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (Caba) y de la provincia de Santa Fe se reunieron con las automotrices con propuestas para revertir la imposibilidad de afrontar los aumentos de las cuotas.

En nombre de sus pares de todo el país, Alejandro Amor –defensor del Pueblo de la Caba y presidente de la Asociación de Defensores del Pueblo de la República Argentina (Adpra)– y su par de la provincia de Santa Fe, Raúl Lamberto, presentaron a las automotrices una serie de propuestas para abordar la temática, y las desarrolladoras de los autoplanes analizarán la posibilidad de algún tipo de respuesta.

Al encuentro en la Caba también asistieron defensores del Consumidor, representantes de la Inspección General de Justicia (IGJ) y referentes de las automotrices que comercializan planes de autoahorro en el país.

El diálogo se centró en la situación que plantean los ciudadanos en las distintas defensorías de la Argentina, principalmente frente a la imposibilidad de afrontar los aumentos de las cuotas.

En este sentido, Amor y Lamberto, con la adhesión de los integrantes de Adpra, presentaron a las automotrices una serie de propuestas “que tienen por objetivo dar respuesta al segmento más perjudicado, que es el de menor poder adquisitivo”.  

Las propuestas presentadas constan de una serie sugerencias entre las que se encuentran el diferimiento de la cuota, la libre elección del seguro, la valuación del vehículo a tener en cuenta al momento de establecer el valor de la cuota y el tope de aumento del valor móvil de la unidad.

En la presentación también se plantea la exención del cobro de multas por renuncia, la disminución de los gastos administrativos, y la exención de ciertos gastos de cobranza extrajudicial, abriendo la posibilidad de facilitar negociaciones de cancelación de saldos de deuda.

El defensor santafesino y su par de Caba también hicieron hincapié en la “necesidad de abordar esta temática desde una óptica que permita sostener el modelo de negocio, ya que éste da respuestas positivas tanto a las empresas como a los consumidores, pero sin desatender la situación de tantos ciudadanos que por la actualidad económica del país se ven impedidos de afrontar los compromisos asumidos corriendo el riesgo, en algunos casos, de llegar a la ejecución del auto prendado”.

Por su parte, las automotrices recibieron las propuestas y señalaron que evaluarán la posibilidad de algún tipo de respuesta, a la vez que solicitaron a las defensorías que hagan llegar las denuncias recibidas en cada una de las instituciones para evaluar los casos en forma individual.

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