La decisión de presentar la fórmula Alberto Fernández – Cristina Fernández (algo que indudablemente halaga a la familia de este redactor) contiene varios elementos singulares. Los mismos deben ser considerados en base a los preceptos conceptuales vertidos por la ex jefa de Estado en sus palabras difundidas esta mañana.
Por un lado, se resguarda el enorme potencial del voto kirchnerista, con fuerte asentamiento en la base social nacional. Luego, Alberto tiene fluidez para desenvolverse en un peronismo variado y a veces esquivo. También, implica un mensaje hacia quienes se resisten a respaldar a CFK pero admiten la necesidad de una transformación de fondo.
Asimismo, es imposible dejar de lado un dato de vigor: Alberto ha mostrado tener un mejor vínculo con las corporaciones mediáticas que las que ha logrado su ahora compañera de fórmula. Puede implicar, en el tramo preelectoral, una distensión relativa. Muy relativa por cierto porque los intereses de esos espacios superan la relación con tal o cual nombre.
Durante la presentación, la senadora indicó que aunque se encuentra orgullosa de lo realizado en el tramo 2003 – 2015, la situación es distinta porque la crisis en la cual se ha sumido al país es “peor” que la vivida durante el sendero que desembocó en el 2001. Y dijo que la iniciativa propuesta hacia las PASO es “en defensa del interés nacional”.
Con todo lo que ello implica.
*Director La Señal Medios / Sindical Federal / Area Periodística Radio Gráfica
Adhemar Principiano
20/05/2019 en 15:42
Perotti, a quien le da el voto en las eleciones nacionales, porque asumio la senaduria por K, pero, sin embargo votos las leyes de C. Ahora calla, porque, esperando los votos de C. para EL 16/6 ? OJO…