El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), cedió ante las amenazas y las presiones yanquis y aceptó militarizar la frontera sur de su país para impedir las migraciones que parten de Centroamérica con destino a EEUU. El Imperio amenazó con aumentar los aranceles a las importaciones mexicanas y logró que el gobierno de México cediera.

“Antes, México no estaba cooperando en la frontera, y ahora tengo una confianza completa, especialmente después de hablar con su presidente, en que cooperarán mucho y en que quieren hacer bien el trabajo”, escribió el presidente de EEUU, Donald Trump en su cuenta de la red social Twitter, tras haber acordado con México.

El acuerdo consiste en tres puntos. En primer término, México se comprometió a desplegar seis mil miembros de la Guardia Nacional en los 11 municipios de la frontera sur. El segundo punto contempla ampliar el programa conocido como “Permanecer en México” a toda la frontera. Esto significa que los migrantes que cruzan a EEUU para solicitar asilo serán retornados “sin demora” a territorio mexicano donde esperarán la resolución de sus casos por las autoridades estadounidenses. El tercer punto establece la disposición de ambos países a continuar con el diálogo en caso de que las medidas adoptadas no den resultados.

Las críticas a AMLO no se hicieron esperar. “En este acuerdo los migrantes sirven de moneda de cambio. Están criminalizando el fenómeno migratorio. Van a militarizar la frontera y detener a mujeres y niñas”, señaló el activista por los derechos de los migrantes Luis Rey Villagrán.

El 30 de mayo Trump amenazó con que impondría una tasa del cinco por ciento (que luego iría creciendo hasta alcanzar el 25 por ciento en octubre) a los productos importados de México si el gobierno de AMLO no detenía a los inmigrantes centroamericanos que atraviesan el territorio mexicano para llegar a EEUU.

Tras varios días de negociación en Washington, los funcionarios mexicanos aceptaron las imposiciones de Trump, que celebró su victoria y, a la vez, volvió a amenazar.

“Sin embargo, si por alguna razón desconocida no hay (cooperación por parte de México), siempre podemos volver a nuestra posición anterior, y muy lucrativa, de poner aranceles; pero no creo que eso vaya a ser necesario”, agregó.

Por su parte, AMLO justificó su actitud apelando a los daños que hubiesen producido las medidas de Trump. “Como jefe y representante del Estado mexicano, no puedo permitir a nadie que se atente contra la economía de nuestro país”, dijo el mandatario mexicano.

Para Trump es un gran triunfo en un tema que es fundamental en el marco de la campaña electoral para su reelección. El mandatario volvió por estos días a apelar a su discurso racista, despectivo, injerencista y de agresión frontal contra México, una estrategia que le dio muy buenos resultados en su carrera hacia la presidencia.

Más notas relacionadas
  • México en alerta

    Trump anunció deportaciones masivas y guerra comercial, y prometió declarar terroristas a
  • Trump, recargado

    El multimillonario condenado volverá a ser presidente de EEUU. Una victoria para la Intern
  • Narrar para vivir

    En su novela La parrillita, Roberto Retamoso ofrece un protagonista colectivo que pone el
Más por Pablo Bilsky
Más en Mundo

Dejá un comentario

Sugerencia

Rosario Salvaje tendrá su cuarta edición en el Galpón 11

Este sábado 23 de noviembre, desde las 20, el festival volverá al espacio de Sargento Cabr