
Ante una gran movilización de obreros que exigió su liberación, el General Juan Domingo Perón habló desde el balcón de la Casa Rosada aquel 17 de octubre de 1945, que luego pasaría a la historia como el Día de la Lealtad, en conmemoración a esa fecha en la que los trabajadores y trabajadoras eligieron a su líder y meses más tarde lo hicieron Presidente.