Por primera vez en lo que va de la Superliga, el rojinegro sumó de a tres fuera del Coloso. Le ganó 3 a 1 a Patronato, en la capital entrerriana, por la 10ª fecha. Salinas, Albertengo y Formica anotaron los goles. Tarragona descontó en el final.
El fin de la racha adversa fuera de casa llegó en un momento inmejorable para el conjunto rosarino. Es que ganar en el Presbítero Bartolomé Grella, ante un rival directo en la zona del descenso, le permitió sacarle una ventaja mayor en los promedios, y acercarse a la punta del campeonato, tras la caída del líder Boca.
En un partido en el que no pasaba nada, un pase bombeado de Maxi Rodríguez entre la última línea de Patronato y el arquero parecía no llevar demasiado peligro, pero un error de Federico Mancinelli en el fondo y con Matías Ibáñez a mitad de camino, Rodrigo Salinas lo transformó en gol a los 19’, ayudado de una buena definición.
En lo que restó de esa primera parte, la apertura del marcador no surtió efecto en el trámite del encuentro, que siguió mostrando a dos equipo muy estructurados, sin salirse del libreto. Así, con imprecisiones y sin un claro dominador del juego, las jugadas de riesgo ni se asomaron por las áreas.
Con dos cambios en el entretiempo, el dueño de casa arrancó con todo el complemento, con una clara chance de Facundo Rosales –uno de los recién ingresados– en el inicio, pero entre Alan Aguerre y el palo, le ahogaron el grito.
La obligación del conjunto dirigido por Mario Sciacqua de alcanzar lo antes posible la igualdad, lo llevó a adelantarse en el campo de juego e inclinar la cancha a su favor, independientemente de las formas. A su vez, la necesidad del equipo dirigido por Frank Kudelka de mantener la ventaja para cortar la racha fuera de casa, lo llevó a retroceder –inconscientemente y pese a sus intenciones– varios metros.
Pero el cerco que el sistema defensivo de la Lepra puso a disposición del arco de Aguerre fue tan efectivo que el Patrón no logró entrar de otra forma que no sea con centros. Y como la pelota estuvo casi siempre en poder de los entrerrianos, a Newell’s sólo le quedó la opción de generar sus chances a través de alguna contra o de pelota parada.
Y esta última fue la que tomó para estirar la diferencia: a los 35’, un envío aéreo desde un tiro libre encontró la cabeza de Lucas Albertengo, para comenzar a liquidar el encuentro. En seguida, a los 37’, el recién ingresado Mauro Formica aseguró el triunfo en la primera pelota que tocó, gracias a una precisa habilitación de la Fiera.
Segundos antes del cierre, el local –que por primera vez en el campeonato ocupará uno de los tres lugares de los que descienden– apenas alcanzó a descontar. Lo hizo a los 47’, a través de su goleador Cristian Tarragona.
La victoria de visitante, ante un rival directo en la zona baja, también fue provechosa en la alta. Es que de ganarle a Independiente en la fecha pendiente, Newell’s alcanzará la línea de los líderes del torneo local. Así, se cumple la mejor fórmula de pelear abajo: peleando arriba.
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