En noviembre, la Secretaría de Energía publicó el reporte “Argentina: Síntesis del balance de gestión en energía 2016-2019”, y el Observatorio de la Energía, Tecnología e Infraestructura para el Desarrollo (Oetec) destacó que “es el propio oficialismo el que contradice, días antes de dejar la Casa Rosada, el cuento de la pesada herencia en su argumento de una balanza comercial energética impagable y en crecimiento explosivo dejada por el kirchnerismo”.

Fuente: Fuente: Argentina: Síntesis del balance de gestión en energía 2016-2019, Secretaría de Energía, Noviembre de 2019.

El titular del Oetec, Federico Bernal, remarcó: “Sin tener en cuenta los niveles de actividad económica e industrial, ni la pujanza del mercado interno durante aquellos años, las importaciones totales de energía se redujeron 45 por ciento entre 2013 y 2015, mientras que el saldo (exportaciones menos importaciones) mejoró un 33 por ciento”.

Por otra parte, el centro de estudios puntualizó que “evaluando todo el período comprendido por el segundo gobierno de Cristina Fernández de Kirchner, se aprecia una mejora entre puntas (2011/2015) del 30 por ciento en las importaciones, versus un saldo que empeoró como consecuencia de una fuerte reducción de las exportaciones en 2015”.

El análisis del Oetec explica que “dicha reducción obedeció a un fuerte crecimiento de la demanda interna de petróleo y combustibles líquidos, por un lado, y a la caída de las exportaciones de crudo Escalante derivado del desplome en los precios internacionales, por el otro”.

El observatorio cargó duro contra la gestión saliente: “El macrismo, fiel a su estilo, no solo mintió en relación a la herencia energética, sino que ni siquiera le importa contradecir sus propios informes”.

Y para corroborar esas mentiras, a continuación citan al propio Lopetegui, que “en su artículo del 16 de noviembre publicado en el diario La Nación afirmó: «Entre 2006 y 2013, el superávit comercial energético de 6.100 millones de dólares anuales se transformó en un déficit de 6900 millones, lo que implicó que en siete años perdiésemos un flujo genuino de 13.000 millones de dólares por año»”.

Fuente: Diario La Nación, 16 de noviembre de 2019.

Para el Oetec, en esas afirmaciones hay un “sesgo absoluto”, puesto que “el funcionario tomó el máximo, que se alcanzó en 2006, y el mínimo, que se registró en 2013. La verdad: superávit de la balanza energética hubo en todos los años entre 2003 y 2010. El déficit apareció entre 2011 y 2015 y fue: -3.100 millones en 2011, -2.200 en 2012, -6.900 millones en 2013, -6.400 millones en 2014 y -4.600 millones en 2015. Es decir, empeoró entre 2011 y 2013, para mejorar entre 2013 y 2015. Con respecto al supuesto flujo de 13.000 millones de dólares anuales perdidos, desconocemos de dónde lo obtuvo, ya que el superávit entre 2003 y 2010 rondó un promedio de 4.000 millones por año. En todo caso, fue este monto el perdido”.

El instituto especializado subrayó: “En suma, el kirchnerismo no dejó ningún saldo impagable ni descontrolado de la balanza comercial energética. Por el contrario, Macri recibió más bien una significativa reducción del déficit (33 por ciento), así como una marcada disminución de las importaciones energéticas (45 por ciento) durante los tres años previos a su asunción”.

Para concluir, el Oetec indicó: “Por cierto, no hubo necesidad de reducir los subsidios para lograr esta mejora ni aplicar ningún tarifazo para demoler la calidad de vida de los argentinos y las argentinas, tal y como se hizo entre 2016 y 2019 a los efectos de generar excedentes exportables tirando abajo el consumo doméstico. Es más, entre 2011 y 2015, la demanda interna creció fuertemente”.

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