El año pasado la editorial local Casagrande publicó, entre muchos otros títulos, Tan lejos, un libro de cuentos del escritor, psicoanalista y crítico de cine, Ricardo Guiamet (Rosario, 1959).
El título del libro remite de algún modo a esa soledad inapelable en la que se encuentran los personajes que naufragan en cada relato (son diez naufragios, así lo indica el subtítulo). Hablando de derivas, en Elogio del riesgo, Anne Dufourmantelle dice que “se trata de ejercitarse en perder la orilla, perderse a secas y encontrar en el camino de esa pérdida el bucle de un deseo intacto”. A esto mismo se refirió el autor en una entrevista que dio a Gastón Bozzano (La Capital, 15/11/20) a propósito de la publicación de este libro. En esa conversación, Guiamet afirmó que “el naufragio en sí es una posibilidad en el sentido más crucial. Es una encrucijada, una chance de tomar otra dirección”. Y sigue: “El naufragio les permite (a los personajes) cambiar el derrotero de sus vidas”.
Entre los más notables del compendio, se aprecia “La creciente”, el cuento que abre el libro, y narra las hazañas de supervivencia de un isleño durante la mayor crecida del Paraná, conocida como “la grande” de 1878. Este relato nos invita a adentrarnos a nuestro delta en estado puro, salvaje, cuando los citadinos aún no habían iniciado la depredación. “A la deriva”, cuenta un caso de demencia senil narrado en primera persona, ofreciendo una lectura más lírica y emotiva, como la percepción centrífuga y caótica del tiempo en la que todas las penas de una vida ocurren en simultáneo. Con la misma tónica, hay otros textos que abordan la soledad en la vejez, como “Escorada”, y “Algarrobo del águila”. “Filibusteros” también es un relato fenomenal que pone a prueba a dos desconocidos que se miden, entre la desconfianza y la solidaridad, en medio de la epidemia de tuberculosis que azotó al país en 1920.
En otro orden, en “La expedición al tres” –un derrotero, en el sentido de las derrotas acumuladas–, un grupo de amigos se juegan el todo por el todo. Y en “La explosión de la santabárbara”, se narra un pequeño drama bovarista encarnado por una mujer soltera llegando a los 40.
Este libro forma un cuerpo, una unidad, tiene médula, núcleo, un sentido que ordena a todas estas historias en las que la soledad y el desamparo son el punto de arranque, allí donde en apariencia no hay nadie, o no hay nada, todo empieza a ponerse en movimiento. En algunos casos, será la mano de un desconocido, la furiosa corriente de un río caudaloso o una voz fantasmal al otro lado de la puerta, los que aportan un sentido, es decir, un rumbo, aunque sea incierto o provisorio.
Tan lejos es uno de los ocho títulos de la generosa cosecha 2020 de la editorial rosarina Casagrande: los dos primeros fueron la nouvelle La montaña y la noche, de Alejandro Hugolini; Memoria del polvo, de Pablo Racca (ganador del concurso de novela social Rosa Wernicke); Por tu culpa más que un loco, de Ber Stinco; La sombra del perfume, de Guillermo Peirano y la novela de Eugenio Previgliano, Pueblo Arroyo Bustos. Sumado a dos libros que fueron co-editados con la editorial Último recurso, las reediciones de La Biblia y el dron, de Silvana Rabinovich y Los zapatos de Carlitos de Federico Lorenz. Como si fuera poco, La chica, de Previgliano, ha sido premiado en la categoría de libro editado en el concurso de la provincia Alcides Greca de narrativa por el trienio 2017-2020.
Después de un año a toda máquina, desde el sello confiaron que para este año ya tienen algunos títulos en preparación, pero solamente adelantaron que el próximo libro será fruto del trabajo conjunto con la editorial Último recurso y el espacio cultural Encuentro itinerante: Se llama La literatura frente al mercado y el Estado y se trata de las entrevistas que hizo la periodista porteña Nancy Giampaolo a los escritores argentinos Alan Pauls, Martín Kohan, Ariana Harwicz y Ana María Shua.
Fuente: El Eslabón