Ante el derrumbe generalizado de los mercados de este lunes recontra negro, George W. Bush salió a pedir paciencia y confianza en el salvataje votado por el parlamento estadounidense. Pero la salida pensada en la Casa Blanca no muestra hasta ahora efectos positivos y la situación se agrava. Hasta el Papa Benedicto XVI habló del tema: “Vemos con el colapso de los grandes bancos que el dinero sencillamente desaparece", dijo.
Benedicto habló en el marco del sínodo de obispos en Roma. “Vemos con el colapso de los grandes bancos que el dinero sencillamente desaparece, que no significa nada, y que todas las cosas que nos parecen tan importantes, en realidad son secundarias”, afirmó el Papa.
"Quien construye la casa de su propia vida sólo en base a las cosas materiales visibles, como el éxito, la carrera y el dinero, construye sobre arena", agregó, en alusión al pasaje bíblico que habla de construir la casa sobre arena o sobre roca.
"Sólo la voz de Dios es la única realidad duradera", dijo también el Papa.
Pero en los centros de operaciones financieras, la voz de Dios poco importa en estas horas signadas por la crisis. Y los índices se derrumban. Según informó Télam a las dos y media de la tarde de este lunes, las bolsas internacionales profundizaban su debacle, lideradas por Rusia, cuyo principal indicador bursátil cedió 19,1 por ciento, y Milán, que registraba la peor caída desde septiembre del año 2004, con 9,17 por ciento en negativo.
En tanto, en Wall Street las bajas rondaban 4 por ciento, con el índice Dow Jones en 3,54 negativo, el Standard and Poors en 3,94 y el Nasdaq en 4,49.
Por estos lares del mundo el panorama es similar: Brasil debió suspender dos veces la operación bursátil porque el Bovespa llegó a caer 12 por ciento, según la agencia de noticias Bloomberg. Y en Buenos Aires se registró un 11,11 por ciento de caída.
Desde Washington, Bush dijo que “va a tardar un tiempo” en notarse el efecto del plan de rescate con 700.000 millones de dólares que aprobó el viernes el Congreso norteamericano.
Según un despacho de DPA, el presidente de Estados Unidos también insistió en defender el salvataje impulsado por su gobierno, asegurando que no es un salvavidas para las grandes corporaciones, sino para toda la economía norteamericana.
“El plan es el adecuado”, sostuvo. Hasta ahora, no se nota.
