Desde la Municipalidad advirtieron que la inusual bajante del río Paraná –entre 8 y 10 centímetros diarios– podría determinar la clausura de los balnearios ubicados en la zona norte de Rosario. Defensa Civil recomienda bañarse durante este fin de año en la zona boyada, atento a que luego el río cae profundamente porque se ingresa al canal de navegación. “Si se cumplen los pronósticos, según los cuales la primera semana del mes de enero la altura del río puede registrar 15 centímetros menos, irremediablemente provocará la clausura”, aseguró Raúl Rainone, titular del organismo en relación a los balnearios de la zona norte. Por la misma razón, la Intendencia tuvo que reprogramar la Caravana de los Deseos 2009, que iba a realizarse el 3 de enero próximo por el Paraná.
El municipio recomendó a los bañistas que visiten este fin de año y el fin de semana los balnearios Rambla Catalunya I y II tener precaución para disfrutar de la playa sin riesgos ante la inusual bajante del río.
Por la poca profundidad del Paraná y la consecuente cercanía de la costa con el canal de navegación, se instó a los bañistas a respetar estrictamente medidas de seguridad como líneas de boyas y recomendaciones de los guardavidas.
Las medidas de prevención se difundieron en una conferencia de prensa realizada en la rambla Catalunya, encabezada por el director de Defensa Civil, Raúl Rainone, y el coordinador de Guardavidas, Sergio Nani, en cuyo marco se instó a los bañistas a respetar las medidas de seguridad.
“El río está bajando entre ocho y diez centímetros diarios, y el espacio para bañarse (hasta el boyado de seguridad) es de aproximadamente nueve metros, desde donde se produce una profundidad que puede llegar hasta los cuatro metros”, informó Rainone.
“La situación puede complicarse más si la tendencia no se revierte, y si se cumplen los pronósticos del Instituto Nacional del Agua (INA) y Prefectura Naval Argentina, según los cuales la primera semana del mes de enero la altura del río puede registrar 15 centímetros menos, situación que irremediablemente provocará la clausura”, agregó el funcionario.
En cuanto a las medidas de seguridad, indispensables para disfrutar de la playa sin riesgos, Nani recomendó especialmente no pasar el boyado, respetar los carteles indicadores, y las indicaciones de los guardavidas y del personal de seguridad.
En el marco de la exposición, el propio coordinador de Guardavidas se introdujo en el agua para graficar en su persona cómo, debido a la profunda bajante y la cercanía de la barranca que conduce al canal, cualquier bañista puede “perder pie” con sólo dar un paso en la zona crítica más allá del boyado.
También los funcionarios explicaron que la Municipalidad dispuso reforzar la seguridad, fundamentalmente para los días 31 de diciembre y 1º de enero, en toda la zona de la Rambla Catalunya I y II, a las que asisten cada fin de semana de 15 a 20 mil personas.
En el mismo están afectados 18 guardavidas que contarán con el apoyo de agentes de la Guardia Urbana Municipal (GUM) y la Policía de la provincia.
Cabe recordar que el mismo fenómeno de bajante del Parana obligó a suspender la edición 2009 de la Caravana de los Deseos que estaba prevista para el próximo sábado, ante los problemas operativos que se registran en muchas guarderías y clubes náuticos para que las embarcaciones puedan salir a navegar. El evento fue reprogramado para el sábado 28 de febrero próximo.
