En la reunión que el cuerpo de delegados de la empresa Mahle mantuvo este martes en Buenos Aires junto al ministro de Trabajo Carlos Tomada se avanzó en el camino que lleva a posibles compradores para la autopartista de capitales alemanes, cerrada desde hace más de diez días. Si bien no hay nada concreto aún, por lo menos empezaron a sonar nombres de firmas interesadas en adquirir la fábrica de aros de pistón asentada en la zona oeste de la ciudad: la autopartista Taranto y Pillson King. Para más tranquilidad, Tomada llevó a la reunión un mensaje de la presidenta Cristina Fernández, quien mandó a decir que “la fábrica sigue con o sin Mahle”.
El cónclave tuvo lugar en el Ministerio de la Producción de la Nación, y además de los delegados de los trabajadores de Mahle –que continúa ocupada desde el cierre– y del ministro Tomada, estuvieron presentes directivos de la empresa y dirigentes sindicales de la UOM. Poco después de la reunión trascendió que Taranto y Pillson King estarían interesados en comprar la autopartista de avenida Perón al 5600.
En caso de que finalmente aparezca el inversor y que los más de 500 trabajadores recuperen sus fuentes de empleo, el final del conflicto tendría similitudes con lo ocurrido en la metalúrgica Paraná Metal de Villa Constitución, donde la administración kirchnerista aportó un inversor para mantener en funcionamiento la fábrica.
Por el momento continúa vigente la conciliación obligatoria, por lo que la empresa deberá pagar los salarios a los empleados correspondientes de la última quincena. El mensaje de la presidenta Cristina cayó bien entre los delegados presentes en la reunión de Buenos Aires. En tanto, la planta sigue ocupada por los empleados, a la espera de una solución favorable para el conflicto laboral que los llena de incertidumbre.
