No me peguen, soy Vila.
No me peguen, soy Vila.

El capitoste del Grupo Uno, a la vez presidente de Independiente Rivadavia, estaba este domingo en la cancha de Quilmes y denunció agresiones de una barra local. El titular del cervecero replicó que el mendocino estaba custodiado por su propia patota armada y que es un “mentiroso".

“Parecía que el empate en un tanto entre Independiente Rivadavia y Quilmes quedaría como un encuentro más de la Primera B Nacional. Sin embargo, tras la contienda deportiva se armó la «rosca» en el estacionamiento del club Cervecero”, cuenta el sitio Mdzol.com

Dirigentes de Independiente cruzaron insultos con gente allegada a la institución de la provincia de Buenos Aires y tuvo que intervenir la policía para disipar incidentes mayores.

”Nos rodearon, nos abrieron las puertas y nos rompieron los autos, e incluso a mi hijo Agustín le rompieron una muela”, dijo Vila.

Tras el enfrentamiento verbal, el presidente de Quilmes, José Luis Meiszner, se refirió a lo ocurrido en las inmediaciones del estadio Centenario: “Yo no sé si hubo un enfrentamiento o no, pero de una camioneta, donde estaba el señor Vila, bajaron personas esgrimiendo un arma, armando un tumulto y amenazando de muerte, lo que provocó algún tipo de desorden”, señaló el mandamás.

“Yo no sé cómo se portará el señor Vila en Mendoza. Es una expresión de cine ordinario lo que hicieron acá en Quilmes”. Y disparó: “Vila es un mentiroso importante de la República Argentina y por lo tanto ha dicho otra mentira. Acá se movió con un ejército de guardaespaldas, que insultaron a todos, la ley de medios, e invitó a algunas damas a que le succionen el pene. Un ordinario total”, concluyó.

(Fuente: Mdzol.com-Info Bae)

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