Este miércoles a las 18 en la bajada Sargento Cabral, la referencia de acumulación indiscutible del kirchnerismo en Santa Fe, Agustín Rossi, pondrá en marcha el 2011. Si bien restan veintitres calurosas jornadas para cerrar el 2010, el acto de lanzamiento a gobernador del Chivo tendrá la potencia de acelerar las agujas del calendario político. Una movilización de más de 10 mil personas volverá a poner en el centro de la escena la recuperación del movimiento nacional y popular, y ya nadie podrá hacerse el boludo –como sucedió tras la muerte de Néstor Kirchner–, ni dejar de reconocer que lo que está sucediendo, independientemente del resultado electoral que consiga Rossi, es que se están reacomodando las placas tectónicas que inauguran nuevas eras y ponen en movimiento los pliegues de la historia.

Se podrá decir que le llevó demasiado tiempo al “elegido” de los Kirchner en Santa Fe convertirse en conductor del movimiento en su territorio. Abundan los comentarios de referentes compañeros que se han quejado de algunos desaciertos del Chivo a la hora de sumar y conducir, de integrar sectores y “garpar” reconocimientos. Pero los mismos admiten que Rossi es el punto de acumulación ineludible del kirchnerismo en la provincia.

Cómo viene Agustín con los votos, es otra discusión. No tenemos encuestas para mostrar, más que los señalamientos no desmentidos por ninguna fuerza, de que Cristina sigue “pum para arriba hasta en Rosario”.

Pero de muñeca se puede decir que viene afilado el Chivo. El Movimiento Evita de Santa Fe selló un acuerdo de unificación con el Movimiento Santafesino por la Justicia Social, tras la candidatura de Agustín Rossi.

En los últimos días, el referente Kirchnerista logró el apoyo del Movimiento de Articulación Popular (MAP) que conduce el diputado provincial, José María Tessa, ex titular del gremio docente santafesino y dirigente fundador de la CTA.

También ha manifestado su apoyo a la precandidatura de Rossi, el Encuentro por la Democracia y la Equidad (EDE), la fuerza que a nivel nacional orienta el diputado, Martín Sabbatella y que en Santa Fe tiene como principal referente al legislador, Marcelo Brignoni.

Por su parte, la Corriente Nacional del Sindicalismo Peronista (CNSP) de Santa Fe, liderada por el secretario general de la FOECYT, Alberto Cejas, también hizo pública la decisión de apoyar la candidatura a gobernador del legislador del FPV para los comicios de 2011. Y la lista sigue.

Fuentes consultadas sobre los preparativos del acto de este miércoles, confiaron que ya no hay colectivos para contratar en el radio de la provincia, y que ya serían más de 500 los que llegarían hasta el bajo rosarino para ser parte de la movilización de apoyo a la candidatura de Rossi.

Algunas consideraciones trasnochadas e irreverentes sobre el movimiento nacional y popular

El territorio de lo nacional y popular, es ese campo heterogéneo de necesidades básicas, ideas, acciones, pulsiones políticas y culturales que mueven hacia cuatro puntos cardinales al mismo tiempo: la autonomía económica (de la patria), la soberanía (del pueblo), la justicia o igualdad (social), la integración (de la nación sudamericana).

Cuando estamos en presencia de un avance en menor o mayor medida hacia esos puntos –marcado esto siempre por las relaciones de fuerzas acumuladas–, podemos decir que estamos frente a un proceso de liberación nacional y popular, aunque como hablamos de proceso, por su puesto que hay diferentes momentos, etapas o estadíos.

Se ha dicho: las guerras de la independencia, las luchas federales, el radicalismo de Alem e Irigoyen, el peronismo de Perón y Evita, los movimientos de liberación de los sesenta, transitaron ese carril de la historia.

El movimiento nacional y popular es, como todo fenómeno social-cultural, un coso que sólo puede ser abordado en su contexto histórico concreto. En abstracto uno puede pararse en la posición nacional y popular, y señalar, como lo hace el cineasta Fernando Pino Solanas, hacia donde hay que enderezar la nave de la patria para llegar al puerto de la liberación. Pero una cosa es una “posición” y otra un sujeto social que pone a rodar los resortes de la historia. Sin sujeto histórico, lo que parece una posición termina siendo una pose.

Luego de la derrota del 55 y el genocidio del 76, el corpus social que daba vida al movimiento nacional y popular fue quebrado, reducido, mutilado y desaparecido. En medio de esa fragmentación, el sujeto colectivo que podía dar forma al movimiento fue tan solo un fantasma, no se podía ser parte del movimiento nacional y popular en los ochentas y noventas, porque como se sabe: el movimiento se demuestra andando.

La categoría que podía contener a quienes se paraban desde el andarivel nac&pop era la fantasmagórica de “espectro”. Desde honrosas excepciones del justicialismo, pasando por peronistas expatriados del partido, espacios sindicales de la CGT y la CTA, hombres y mujeres sueltos recluidos en la militancia social, cultural o en algunos organismos de derechos humanos; la militancia nacional y popular podía ser parte del espectro, mas no formaba un sujeto colectivo y mucho menos se podía mover.

Las venas abiertas de la Argentina (al igual que las de América Latina), tras largas masacres y dictaduras asesinas (genocidios indio, gaucho, de los 30 mil desaparecidos), no soportaba más que la Nación continúe su decurso sin comenzar a cerrar heridas.

Luego de la explosión de 2001, originada por las políticas aplicadas por las históricas clases dominantes, –cipayas como en pocos lugares del mundo–, los Kirchner iniciaron un proceso de deconstrucción del Proceso de Reorganización Nacional y pusieron en práctica políticas de inconfundible corte nacional y popular: reparación histórica (juicio y castigo a los represores del terrorismo de estado); construcción de mayores márgenes de autonomía económica (enfrentamiento con el FMI); creciente restitución de derechos laborales y económicos (paritarias y recuperación paulatina del trabajo y el mercado interno); y de paulatina reconquista de la participación ciudadana (vuelta de las mayorías sociales a la política, reconocimiento a las mal llamadas minorías).

¿Estamos lejos del horizonte soñado? ¿Estamos apenas en la línea de largada del proceso histórico? ¿Vamos a la velocidad ideal? La respuesta a esas preguntas en realidad no importa tanto. Lo significativo es la certeza de que hay un rumbo hacia el que es posible reunir una vez más los fragmentos del espectro nacional y popular, y ponerlo en movimiento.

El futuro llegó hace rato. Todo un palo, ya lo ves. (Patricio Rey)

Como recordó el amigo Gabriel Fernández, Arturo Jauretche invitaba a los hombres de tribuna y prensa a cantar el palo en el que se rascaban. También solía enojarse el viejo pensador nacional con aquellos comandantes de la táctica del “animémonos y vayan”. Por eso avisa el que firma esta nota, que no sólo irá a cubrir periodísticamente el acto de lanzamiento de Agustín Rossi, sino que estará ahí para ser parte del “pogo más grande de Santa Fe”, y de lo que espera sea una nueva etapa del movimiento nacional que comienza a tomar forma en la provincia invencible.

Más notas relacionadas
Más por Juane Basso
Más en Ciudad

Dejá un comentario

Sugerencia

Piden prohibir la publicidad masiva de apuestas on line

El diputado nacional Eduardo Toniolli presentó un proyecto de Ley de regulación de la publ