Farolitos celebrará “un fin de año de transformación y no de oscuridad”.
Farolitos celebrará “un fin de año de transformación y no de oscuridad”.

La banda rosarina Farolitos festejará sus “Diez años en lucha” tocando el 10 de diciembre en el club El Luchador, de Lima al 1300, a las 21. Previamente, a las 18, convocan a una nueva Asamblea del Huerto de la Música, en Zeballos 2600. 

La banda nació en La República en medio del intenso agite del 2001, al igual que muchas expresiones de protesta de la época para alumbrar y copar a miles de jóvenes provenientes de distintos barrios de la ciudad, como Ludueña, Empalme Graneros, Azcuénaga, Echesortu, Refinería, 7 de Septiembre, Remedios de Escalada, Belgrano, Rucci, Fisherton, Independencia, Tablada, Pichincha, Alberdi, Toba, y la lista sigue.

Marcos Migoni, voz de la banda señaló que después de tocar en lugares alternativos durante 10 años junto a mucha gente “el objetivo sigue siendo recuperar lo que nos pertenece: la calle”. Porque Farolitos “es una banda que hace música, trabaja un mensaje, varios mensajes, y que se propuso tocar en clubes, potreros, plazas y lugares que estaban perdidos, porque se perdió la calle durante los 80 y los 90”, añadió.

Rock barrial

Haciendo balances, el vocalista explicó que en un principio “fue un proceso de total transformación primero individual de cada persona que integró la banda. Ya en los últimos años faroles pudo encarar mejor la cuestión territorial, de trabajar en nuestro barrio para la recuperación de espacios públicos”, contó el músico respecto al rumbo que fue tomando el grupo. “Una transformación individual que desembocó en un colectivo distinto”, aseveró.

Respecto a los temas Migoni explicó: “Cada canción es un andar y es una asamblea más; un recorrido y una experiencia sobre todo, así que los dos discos son eso”, en referencia a los trabajos discográficos En esta parte de la tierra y Las voces del sótano.

Los nombres de los discos, según el músico representan “a esos sectores que están escondidos y que a una minoría no le conviene que se vean, así que alzar esa vos y que otros alcen otra vos y compartir el mensaje de otras experiencias hace que esas voces hagan insoportable la vida a estos monstruos que son los poderes económicos.” Y añadió: “Yo creo que la música parte de ahí esa concepción, la música para nosotros es eso, es alegría, participación y transformación sobre todo.”

Diez años no es poco

Para la celebración de los diez años de la banda y la despedida del 2011, los músicos militantes compartirán escenario con otras bandas amigas como “los chicos del colectivo Bella Vista que es un barrio hermano pegado al nuestro”, señaló Migoni; Ojo Animal, banda recién nacida en La República y Cualquier Bondi.

“Una década en lucha” se llama la fiesta que convoca a todos “con alegría para que sea un fin de año de transformación fuerte y no de oscuridad como era hace 10 años –dijo el músico–. En aquella oscuridad ya había muchas lucecitas que estaban prendidas y las quisieron apagar pero no pudieron, hoy somos mas las lucecitas porque se multiplicaron”, concluyó.

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