El canciller Héctor Timerman denunció que “el silencio de La Nación, Clarín y La Razón fue premiado con Papel Prensa” al declarar en el juicio por las torturas cometidas a su padre, Jacobo, en el denominado Circuito Camps.
“A mis padres los secuestran y a los directivos de los diarios les entregaron Papel Prensa, ahí está la respuesta de por qué los medios buscaron crear un monstruo y decir que David Graiver y Lidia Papaleo de Graiver eran el gran enemigo de la República Argentina”, dijo el canciller.
Timerman declaró este martes ante el Tribunal Oral Federal 1 de La Plata, por el cautiverio de su padre, el periodista Jacobo Timerman, en el centro clandestino de detención Puesto Vasco, durante la última dictadura militar.
Remarcó el funcionario que “la necesidad de demonizar a David Graiver, que tenían los medios hegemónicos de aquel entonces, Clarín, La Nación y La Razón, se debía a la necesidad de hacer pasar lo más desapercibido posible la apropiación de Papel Prensa”.
“A nosotros siempre nos llamó la atención esa manía de poner a Graiver como el gran culpable de todos los males que vivían en la Argentina. Se mezclaban lo que en ese entonces era considerada la subversión política, con la subversión económica, haciendo un gran guiso, y los grandes culpables de eso era dos personas: Jacobo Timerman y David Graiver”, sostuvo Timerman.
El canciller consideró que “el secuestro de mi padre está vinculado a la apropiación de la empresa Papel Prensa y la necesidad de secuestrar a Lidia Graiver para cometer esa apropiación”.
Por otra parte, dijo que “durante la dictadura hubo una razia contra los periodistas, no solo del diario La Opinión, en donde hubo muchos desaparecidos y detenidos. En la Argentina hay 100 periodistas que están desaparecidos o asesinados, hubo realmente un plan sistemático de desaparición de periodistas”.
Y continúo: “Yo hago la autocritica en relación a lo que he vivido en aquellos años, por la poca o mucha responsabilidad que tuve, pero creo que uno de los grandes dramas que vive la Argentina es que los mismos directores de medios que estaban en aquel entonces, hoy son los que dirigen los diarios que casualmente crean un relato sobre la realidad que no se ajusta a la verdad”.
Timerman aclaró que “no digo que esas personas no debería dirigir diarios, simplemente creo que para hacer un trabajo como el que un diario tiene que hacer, es necesario reconocer los errores y los horrores del pasado”.
