Juan Salinas

Autor de una investigación sobre el ataque a la Amia, que realizó a pedido de la propia entidad, el periodista considera que hasta la muerte del fiscal hubo un alineamiento de La Nación, Clarín Página/12 y Tiempo Argentino alrededor de la investigación del atentado.

Juan Salinas escribió AMIA, El atentado. Quienes son los autores y por qué no están presos (Planeta, 1997), e integró antes, el mismo año del ataque, un equipo de investigación convocado por la propia mutual judía para indagar sobre lo que había ocurrido. Periodista que transitó numerosos proyectos como El Porteño, el Diario de Barcelona o el rosarino El Ciudadano, actualmente dirige la sección Memoria de la agencia Télam. En diálogo con el eslabón, el investigador –que viene siguiendo el caso Nisman en su blog pajarorojo.com–, puso en contexto el escenario donde despliega la novela policial del verano y analiza cómo operan los medios nacionales y de qué modo lo hicieron durante toda la causa que condujo el fiscal muerto.

—¿Cómo analizás el comportamiento que han tenido los medios alrededor de la muerte de Nisman?
—Los medios, lo que tratan es centrar todo en la muerte de Nisman y al mismo tiempo olvidar y ocultar quién era Nisman. Pero Nisman tiene una larga historia, acordémonos que ya estaba con los fiscales Eamon Mullen y José Barbaccia en toda la investigación de la causa Amia desde un primer momento. Quiero decir que lleva más de veinte años dedicados al encubrimiento. Además un encubrimiento de campanillas, porque en los últimos diez años se deben haber gastado no menos de 300 millones de pesos en la no investigación.
Lo que Nisman vino a hacer fue seguir esa labor de encubrimiento que había realizado (el juez Juan José) Galeano. Galeano estaba quemadísimo y lo siguió Nisman. Se ha acumulado un expediente que según el abogado (Juan Gabriel) Labaké (defensor del imputado en la causa AMIA, Alberto Kanoore Edule) reúne un millón de fojas, que no son más que hojarasca, que sirve para tapar lo que nosotros descubrimos cuando iniciamos nuestra investigación. Yo te recuerdo que yo estuve en un equipo solventado por la propia Amia que se formó a fines del año 94.

—¿Qué es lo que se había descubierto con aquella investigación?
—Habíamos descubierto que había sirios-argentinos vinculados con la familia de (Carlos) Menem y con Monzer Al Kassar por un lado, y que la policía federal estaba activísima en el encubrimiento, eso lo descubrimos de movida. Hoy tengo la certeza de que gente de la Federal no sólo participó del encubrimiento sino de la colocación de los explosivos. Todo esto hubo que taparlo.
Al principio, como lo contó en la nota que escribió (Horacio) Verbitsky por los diez años del atentado, hubo un enviado de (Yitzhak) Rabin que habló con Menem y decidieron a las pocas horas del atentado a la Amia echarle la culpa a Irán. Y hay que acordarse que (Carlos) Ruckauf, que estaba en Estados Unidos, a las horas del ataque le echó la culpa a Irán, porque así se lo dijo el Departamento de Estado. Es decir, echarle la culpa a Irán fue un acuerdo político con Estados Unidos e Israel que no se fundamentaba en ningún hecho material. Y esto está relacionado con su antecesor, el atentado a la embajada de Israel.

—¿Dónde se cimenta la tesis del ataque de Irán?
—En la presunta existencia del coche bomba, con choferes suicidas del hezbolá libanés instados por Irán. Pero la verdad es que no hubo coche bomba para empezar, en ninguno de los ataques.
Decir que hubo coche bomba es la piedra basal del encubrimiento y si uno desmiente esa piedra deja pagando a la Side, el Mosad, la CIA, los gobiernos de Menem, De La Rúa, Néstor al principio; y a Clarín y La Nación, pero también Tiempo Argentino, fijate que Szpolski era el tesorero de la Amia; y también de Página 12.

—¿Hubo a tu criterio, como han planteado algunos analistas, un alineamiento de los medios, independientemente si son favorables u opositores al gobierno nacional, sobre la investigación de la Amia y el trabajo que estaba haciendo Nisman?
—Claro, porque los medios que son favorables al gobierno son a la vez muy sensibles a las presiones del sionismo. La Daia e Israel se comportan como si la bomba la hubieran puesto ellos mismos. Son los campeones del encubrimiento, son los que menos quieren que se sepa.

—¿Y eso cómo se manifiesta para vos?
—Es importante distinguir hechos de conjeturas, aunque sean muy fundadas. Yo estuve trabajando muchos años y te puedo hablar de hechos. Hechos: es que no hubo coche bomba, esto lo puedo demostrar en todos lados. Conjeturas: es porqué se hicieron los atentados.
Yo creo que están motivados en que hubo mejicaneadas de gente que se quedó en el proceso de lavado, de blanqueo, con el dinero producto del tráfico de drogas y de armas.
Los argentinos vimos la serie de Pablo Escobar, pero no se cuenta creo yo –he preguntado porque yo no la vi toda–, en ningún momento se cuentan cosas tan elementales como que los sicarios de Pablo Escobar tenían entrenadores israelíes que después se pelean con Escobar y ayudan a sus perseguidores. Tampoco se dice que la tecnología que supo usar para atentados fue israelí. Y lo más importante es que Pablo Escobar lavó el dinero del Cártel de Medellín a través de una red de sinagogas e instituciones judías de la costa este de los Estados Unidos, que se quedaban con el 20 por ciento del dinero, y el resto lo reintroducían en el sistema bancario norteamericano.

—¿Y eso está documentado?
—Eso lo investigaron medios norteamericanos de izquierda como The Nation, pero ningún medio importante como el New York Times o el Washington Post jamás lo publicaron. ¿Por qué? Porque el sionismo tiene un poder de presión muy grande. Por eso si vos no quisiste entrar en ese acuerdo de que la culpa es de Irán, al que en la Argentina entraron Clarín, La Nación, Página 12 y Tiempo Argentino, te quedás afuera de todo, o sea: no podés trabajar en esos medios y quedás absolutamente marginado.

—¿En este contexto que describís, qué pensás que puede haber ocurrido con Nisman?
—Hasta ahora todos los datos apuntan en la dirección del suicidio. Pero se haya matado él o lo hayan matado, es evidente que esta muerte es utilizada contra el gobierno. Y el hecho de que a los dos minutos salga una editorial en el New York Times pidiendo una intervención internacional sobre la Argentina por este tema, demuestra en dónde estamos parados.
De todas maneras hay que tomar todo con pinzas en el sentido de que Estados Unidos es un imperio, y esta posición, la de la CIA, no es la misma posición de Obama, porque Obama quiere acordar con Irán.

—¿Y por qué explicás que Cristina haya impulsado el memorandum con Irán?
—Yo creo que Cristina cuando se jugó por el memorandum de entendimiento con Irán es por dos cosas. Porque ella estuvo en la comisión de seguimiento de las investigaciones y entonces intuye que Irán no tiene nada que ver. Y la segunda es que creyó llegado el momento, porque se forjó un panorama en el que vio que Obama quería acercar posiciones con los iraníes, y entonces es lógico que evalúe que si Obama quiere arreglar, ella también. No sé si midió bien la potencia que iba a desencadenar con esa decisión.
Pero ahora viene el dilema si nos pasamos hablando de Nisman o hablamos de la Amia. El caso Amia se puede dilucidar si está la voluntad, sobre todo si se exhuma también el caso de la embajada de Israel, que está enterrado y congelado, a pesar de que también tiene un Nisman, que es el secretario especial de la Corte, Esteban Canevari, al que alguien debería preguntar qué hizo todo este tiempo.

Artículo publicado en la edición de este sábado del semanario El Eslabón.

Más notas relacionadas
Más por Juane Basso
Más en País

2 Lectores

  1. mabel lazzuri

    11/02/2015 en 1:40

    Me parece,poco serio, por ende poco o nada , creíble. Señores, asesinaron, o indujeron, al suicidio, a un fiscal, de la nación. Es gravísimo, en una democracia, que ya lleva treinta años. Que actúe, libremente, el poder judicial , y no como felpudo, del ejecutivo.

    Responder

    • Andrea

      13/02/2015 en 10:13

      El Poder Judicial no debe ser felpudo ni del Poder Ejecutivo, ni de las Corporaciones, ni de los Servicios, ni de nadie. Mira toda la pelicula

      Responder

Dejá un comentario

Sugerencia

Fuga en la Bolsa

El gobernador Pullaro pidió bajar retenciones al agro; recursos nacionales para infraestru