Tal como se había anticipado antes de que finalicen las vacaciones de invierno, Amsafé y Sadop anunciaron un plan de lucha en reclamo de la reapertura de las negociaciones paritarias con la provincia, que rechaza esa posibilidad bajo el escudo de «cuidar los recursos». Los maestros resolvieron en sendas asambleas dos paros de 24 horas, uno para el miércoles 24 y otro para el 2 de septiembre, con el objetivo de conseguir recomponer sus salarios frente a la estampida inflacionaria. En tanto, la Central de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) convocó a un paro nacional también para el 24.
En Santa Fe, como ocurre en las provincias de Buenos Aires, Chaco, Santa Cruz, Entre Ríos y Chubut, los docentes de escuelas públicas y privadas ponen en carpeta un nuevo aumento salarial, con la explicación de que a fin de año la inflación acumulada, que se proyecta cerca del 50 por ciento, habrá superado con holgura el incremento del 32 al 35 por ciento firmado en marzo. En rigor de verdad, ninguno de los convenios colectivos acordados por los sindicatos alcanzó la inflación anual estimada.
El 60 por ciento de los docentes que participaron de la asamblea de Amsafé se inclinó por la moción de paro para el 24 de agosto, movilización a la Marcha Federal el 1º de septiembre en su paso por Rosario, y paro nacional y provincial al día siguiente, cuando se plegarán a la marcha en Buenos Aires para participar del acto de cierre de la Marcha Federal convocada por la CTA y otras organizaciones sindicales y sociales, que contempla paros, movilizaciones y jornadas provinciales de protesta.
El gobierno de Mauricio Macri ve visiones y dice que la inflación está en baja. Y a la vez desalienta cualquier posibilidad de reabrir paritarias porque eso atenta contra su estrategia, según entienden, de moderar la suba de los precios. La tasa de inflación ya duplica la que despidió a la gestión kirchnerista y se ubica muy por encima de la meta del 25 por ciento planteada por el equipo económico de Cambiemos para 2016. De ahí la inédita situación de fuertes reclamos sindicales por reabrir la discusión salarial en esta parte del año, donde se puede afirmar que las promocionadas bondades del segundo semestre, como Papá Noel y los Reyes Magos, no existen.
Por su parte, Javier Almirón, secretario gremial de Amsafé, aseguró: “El gobierno provincial tiene que cumplir con el acta paritaria de marzo, que en el último párrafo dice que van a estar monitoreando el poder adquisitivo del salario docente, y está claro que ante el aumento de la inflación, nuestro salario, como el de todos los trabajadores, ha quedado desfasado”.
La ministra de Educación provincial, Claudia Balagué, reiteró que el gobierno no tiene previsto reabrir la paritaria docente, porque el acuerdo de marzo, según la funcionaria, es por todo el año. En el mismo sentido se pronunció el ministro de Gobierno Pablo Farías: “Tenemos que ser responsables con los recursos del Estado. No tenemos previsto reabrir la discusión salarial, aunque no negamos la inflación y consideramos que es alta. Pero hay mayor demanda social y enfriamiento de la economía que impacta en la recaudación”.
Tanto Almirón como Sonia Alesso, secretaria general de Amsafé, coincidieron en subrayar el deterioro del poder adquisitivo de los salarios que empezó con la devaluación, siguió con el aumento de la canasta alimentaria y el tarifazo. «Hubo una brutal transferencia de recursos a los sectores más ricos y ninguna medida que haya apuntado a mejorar la situación de los trabajadores”, indicó Alesso.
Almirón lamentó que la provincia “de manera incorrecta plantee que en el acta paritaria decía que era anual, cuando no es así”. Y advirtió: «(Miguel) Lifschitz va a tener que volver sobre sus pasos porque se va a ir incrementando el nivel de protesta de los docentes y el descontento con el gobierno”.
Además de los docentes provinciales, trabajadores estatales de ATE reclaman la reapertura de la paritaria salarial. Los empleados municipales también dejaron picando la posibilidad de realizar alguna medida con idéntico reclamo para municipios y comunas de Santa Fe. Y los profesores universitarios de Rosario nucleados en Coad, que en principio se sumarían al paro del 24, reclamaron la «urgente reapertura paritaria ante el deterioro del poder adquisitivo del salario por los tarifazos y la escalada de precios».