Los obreros, con la ocupación de las tres plantas de la firma incluida, reclaman el pago de sueldos, aguinaldos y vacaciones adeudados. En algunos casos, la empresa les debe hasta 100 mil pesos.
Los 350 trabajadores de la fábrica de cosechadoras Vassalli de Firmat perdieron la paciencia. Las demoras en los pagos de sus sueldos, y de los retiros voluntarios de los 52 operarios que “aceptaron” irse de la empresa en enero de este año, agotaron la capacidad de tolerancia de los laburantes que resolvieron tomar las tres plantas de la firma. “De acá no nos movemos hasta que aparezca la plata”, definieron al cumplirse una semana de la ocupación.
Pedidos de desalojos por alquileres impagos, cortes de luz y gas, enfermedades derivadas de la angustia de no contar con el legítimo mango ganado con el sudor de la frente, son algunas de las situaciones que enumera Diego Romero, secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Firmat, a la hora de explicar el costado menos dimensionado del conflicto.
“Las tres plantas seguirán tomadas a la espera de futuras negociaciones que puedan llegar a destrabar el conflicto, aunque estamos muy lejos de un acuerdo” dice a el eslabón Romero. Y remarca: “De acá no nos movemos hasta que aparezca la plata”.
El titular de la UOM Firmat plantea que está rota la confianza entre los trabajadores y la empresa por “las reiteradas mentiras e incumplimientos con los compromisos asumidos con los compañeros”.
Para destrabar el conflicto, los trabajadores quieren cobrar el cien por cien de lo que le está debiendo la empresa. La deuda incluye dos meses de sueldo de atraso, vacaciones, aguinaldo y cheques recaídos. “Hay compañeros a los que se les está debiendo hasta 100 mil pesos”, indica Romero.
“Dentro del conflicto también está el tema de los retiros voluntarios, con los que la empresa tampoco cumplió con lo que se comprometió a pagar, y eso que se firmó en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe”, agrega el dirigente de la UOM.
La Navidad pasada Vassalli repartió a 52 de sus obreros sendos telegramas despidos que dispararon un fuerte conflicto sostenido hasta entrado el 2018. En enero las expulsiones se convirtieron en retiros voluntarios y la firma se comprometió a un plan de pagos ante sus empleados en el Ministerio de Trabajo de Santa Fe. Pero eso tampoco se está cumpliendo.
“Todo el problema es de plata”, subraya Romero. “La empresa plantea que la gente saque las máquinas, es decir que sigan produciendo, y que después cobre, pero eso es lo que nos viene diciendo e incumpliendo, eso ya nos pasó, así que los trabajadores ahora definieron que si no aparece la plata no se produce”, remarcó.
El jueves pasado hubo una reunión informal de la que participaron entre otros el ministro de Trabajo de la provincia, Julio Genesini; el intendente de la Firmat, Leonel Maximino; el propio Romero y el abogado del sindicato, Pablo Cerra; más el grupo inversor encabezado por Néstor Girolami y su nuevo CEO Luis Cagliari. “La reunión no avanzó mucho porque mientras no aparezca dinero, los trabajadores van a continuar con el reclamo”, reiteró dirigente de la UOM.
“Los montos que les deben a los trabajadores, que llegan hasta cien mil pesos en sueldos adeudados, quieren decir que ya se pusieron demasiado la camiseta de la empresa, han aguantado demasiado, y hasta acá llegamos”, afirma Romero. Para luego añadir: “Ya no podemos permitir que nos deban más, necesitamos una solución a corto plazo”.
El martes de la semana que viene a las 10 de la mañana habrá una nueva audiencia en la sede rosarina del ministerio de Trabajo provincial. Pero los trabajadores siguen analizando en asamblea nuevas medidas de fuerza.
“El 1° mayo hicimos una movilización en Firmat que concluyó con una peña solidaria para ayudar a los obreros y sus familias con alimentos y otras necesidades”, cuenta Romero. “También estamos analizando volver a cortar la ruta nacional 33 y marchar hasta la casa de la dueña anterior de la empresa, Mariana Vassalli, que también es responsable de lo que está pasando”, adelanta.
Mientras tanto, la toma continúa con turnos rotativos de a 20 operarios durante las 24 horas, para asegurar que no haya un vaciamiento de las plantas y la empresa se lleve las maquinarias. “Seguimos acá adentro hasta que se destrabe el conflicto. Los trabajadores quieren venir a trabajar en horario normal y que les paguen los que se les debe. Lo justo y nada más”, concluye Romero.
Piden la intervención de Nación
Apenas iniciada la toma el viernes 27 de abril, la senadora nacional por Santa Fe María de los Ángeles Sacnun solicitó: “La situación es cada vez más compleja, por eso es necesario que el Estado nacional, a través del Ministerio de Trabajo y del Ministerio de Agroindustria, intervenga de forma rápida para solucionar el conflicto, que los trabajadores puedan cobrar y que la empresa vuelva a funcionar”, la legisladora.
Para la senadora “es necesaria la colaboración tanto de los empresarios como del Estado nacional y provincial para evitar una grave crisis social”. “Hay que llevar tranquilidad a las familias y a los trabajadores. El Estado no puede rehuir a su responsabilidad”, remarcó Sacnun.
En ese sentido, la Legisladora solicitó que Vassalli sea beneficiada con la puesta en funcionamiento del Programa de Recuperación Productiva (REPRO), que depende del Ministerio de Trabajo de la Nación, y consiste en el pago, por parte del Estado, de una parte del sueldo de cada trabajador.
“Esto fue planteado durante la reunión llevada a cabo en el Ministerio de Producción de Santa Fe, el 23 de marzo pasado, donde participamos junto a funcionarios nacionales y provinciales, legisladores y referentes políticos de la ciudad de Firmat, pero aún no hay novedades. Necesitamos de una rápida intervención del Ministerio de Trabajo y del Ministerio de Agroindustria para resolver de forma inmediata la situación de los trabajadores, que necesitan cobrar su salario”, planteó la legisladora.
Asimismo, Sacnun manifestó la necesidad de que los programas REPRO sean puestos en funcionamiento para otras empresas que están viviendo una situación similar, como Dasa, Rega, Alcal, y Cortes y Plegados Firmat.