El profesor de Historia Gabriel San Sebastián señala que la aplicación de la ESI en la provincia, más allá de la propaganda que se hace el oficialismo, muestra más falencias que aciertos.
El mismo día en que la Cámara de Diputados de la Nación le dio media sanción a la legalización del aborto, la cámara alta de la provincia de Santa Fe hizo lo propio con el proyecto de ley que busca garantizar que todos los estudiantes reciban Educación Sexual Integral (ESI) en los establecimientos a los que asisten, y en todos los niveles.
En ese sentido, cabe recordar que durante la gobernación de Binner, en 2003, había un postítulo en la Universidad Nacional de Rosario que duró solo cuatro años y que el propio socialismo dió de baja.
Gabriel San Sebastián (54), profesor de Historia con un postítulo en Educación Sexual de la Facultad de Psicología de la UNR dialogó con el eslabón acerca de la ley en la provincia de Santa Fe, su aplicación en la educación y las falencias que desde hace doce años viene notando en la tarea de aplicarla.
—¿Cómo fue que te decidiste a capacitarte en esta materia?
—Siempre me interesó la idea de educar sexualmente a nuestros pibes y debido a la experiencia personal de un compañero, Claudio Chacone, que en 2003 les pasó a unos chicos del barrio Cabin 9 el video ¿De dónde venimos? y casi va preso, fue que me decidí a hacerlo. Lo que me gustó es que todos los que llegábamos a estudiar, teníamos que desestructurarnos. Si no lo hacías, no podías seguir, de hecho muchos fueron quedando en el camino. Se armaban unos debates hermosos y hasta el dia de hoy hay gente de mi edad que no puede salirse de ciertas estructuras.
Cuando hablamos de ESI, no solo entra en juego la sexualidad de los jóvenes sino también todas las aristas que ello conlleva: el placer, los gustos, las responsabilidades, el respeto.
—¿Después del postítulo, qué vino, cómo siguió la carrera de formación en el área?
—Luego de hacer el postítulo me quedé con la duda de saber cómo lo trataban del otro lado, desde la derecha, por decirlo de alguna forma. Entonces hice un seminario en el Santísimo Rosario y me llevé una grata sorpresa. Si bien había muchos autores y cosas de las que no se hablaba, me sirvió la parte pedagógica para aplicarla a los conocimientos que había incorporado en la UNR. He ido a seminarios internacionales, y también a formar gente. En Misiones, por ejemplo, participé de dos jornadas intensivas donde capacitamos a trabajadores de centros de salud. Junto a un compañero de allá diseñamos y presentamos el programa de formación docente en el Ministerio de Educación de Santa Fe, que fue la primera provincia en adherir a la ESI. Hoy habría que revisar ese programa porque en doce años pasaron muchas cosas, cambiaron leyes, se aprobaron nuevas, está obsoleto.
—Hablando sobre Santa Fe y la avanzada en esta materia, ¿qué opinás vos, desde tu experiencia en el campo y las herramientas que te ofrecen desde el Estado?
—La provincia aparece como “avanzada” pero hay falencias. Durante muchos años utilizaron todo el material que les enviaba Nación, hoy ya no tienen esas herramientas y tampoco proponen herramientas propias. No hay material didáctico, ni siquiera algún eje en el cual basarse para aplicar la ESI en cualquier grado de la educación.
Al no haber una formación docente en el tema, es muy difícil que los y las trabajadoras de la educación puedan aplicarla con sus alumnos. Si no tienen la formación necesaria, es incomprensible cómo van a hacer para enseñarlo en las aulas.
—¿Considerás un fracaso la formación docente en materia de ESI?
—Comparándonos con otras provincias somos la vanguardia, pero falta mucho y no veo que hasta el momento haya un plan de acción acorde a los tiempos que corren. Deben reconocer que perdieron mucho tiempo en la formación.
El modelo fracasa porque no hay ideas propias, la cuestión migra al partidismo, una cosa es que sea una decisión política su aplicación, pero ya cuando ponen gente de ellos, empieza a haber fisuras. Esas personas no están preparadas, no trabajan en el campo, en las escuelas, no tienen la formación necesaria como para después enseñar y evaluar a otros.
En estos diez años nunca tuve a alguien que me dijera cómo dar la ESI, ni hablar de material didáctico. No hay quien regule su aplicación, no hay gente capacitada para evaluarnos y lo grave es que hay potenciales peligrosos hablando de ESI de una forma que no es la adecuada y te pueden destruir todo lo que trabajaste.
Hablar de ESI en Santa Fe, como formación docente, es hablar de un fracaso. Perdimos diez años.
—En tu caso, ¿cómo trabajas la ESI?, ¿es un espacio curricular aparte, o se va entrelazando con los demás?
—En este momento es necesario aplicar la ESI en todas las áreas curriculares, no creo que sirva una materia especial, no ahora. En Formación Ética doy ESI, me viene perfecto el tema de los valores, el placer, las responsabilidades, la violencia y la discriminación. En Economía, por ejemplo, trabajé con las chicas de AMMAR y resultó un éxito, hubo una charla a sala llena y surgieron debates tremendos. Ahora volví con este tema porque creo que después del aborto una de las próximas discusiones va a ser la legalización o no de la prostitución. Eso me sirvió para explicarles que se está legislando acerca de algo que ya existe. El aborto existe y no van a dejar de practicarlos, la cuestión está en si lo legalizamos y se dejan de morir pibas pobres. Con la prostitución pasa lo mismo, existe desde siempre y va a seguir existiendo, la cuestión está en si le damos o no un marco legal a la actividad y dejamos de fortalecer el negocio de la trata y la explotación. Siempre hay herramientas para explicar desde la ESI. Me acuerdo que en 2007 hubo un hecho que tuvo grandes repercusiones, y todavía no habíamos incorporado el nivel secundario. Los alumnos de 5º grado, jóvenes de entre 10 y 15 años, o a veces más, de la escuela 551 “Sonia Beatriz Gonzalez”, pedían albergues transitorios municipales. Habíamos estado hablando acerca de la sexualidad y el lugar donde lo hacían, y te contaban que no tenían un lugar, entonces era el baño de los boliches, contra un árbol o donde podían. Y, justamente, dentro de la ESI, se habla el eje del placer y la necesidad de poder hacerlo en un lugar cómodo, privado. Ese fue el primer disparador, y a partir de ahí empecé a armar un programa.
—¿Cuáles creés que son los ejes fundamentales a tratar con los alumnos hoy en día, qué necesitan saber y cómo?
—Desde el 2006 hasta ahora la pibada ha crecido, son unos genios los pibes. Pero necesitamos que tengan a quién hacerle preguntas y que les provean las herramientas necesarias para encontrar respuestas a sus inquietudes.
Es importante que los jóvenes sepan qué les gusta, dónde les gusta, cómo lo quieren, y que puedan expresar esto a su pareja. Cuando tenés desconocimiento de tu cuerpo, o no sabés a quién recurrir en caso de violencia fuera de la relación placentera, por ejemplo, entonces no podés avanzar.
También tiene que haber una continuidad, no lo podes dejar en un tallercito, porque quedan interrogantes que los docentes no están capacitados a contestar.
nidia kreig
16/07/2018 en 20:27
Es una falacia sostener que la prostitucion es asimilable al aborto. Maternidad obligada y prostityucion son instituciones fundantes del patriarcado. Mujeres de la propiedad deun varon para madres y esposas y mujeres de todos los varones, mujeres publicas. Eso es el patriarcado. Esto es lo que esste señor defiende.
nidia kreig
16/07/2018 en 20:29
La falacia de sostener porque existe la legalizamos. Y profesor de historia! Los occidentales blancos pueden usarian el mismo argumento: la esclavitud existe ,por lo tanto legalicemosla. Se naturaliza la opresion y entonces se pide legalizarla!!!!.
nidia kreig
16/07/2018 en 20:32
Soy profesora de historia y feminista. La prostitucion no existio siempre, deberia el señor saberlo. Nos fue impuesta junto a otras instituciones con la aparicion del patriarcado. Lealo en jEngels o sino en Carlo Paterman «El contrato sexual». Grave que lleve a AMMAR a promocionar la prostitución como salida laboral. El cuerpo no es mercancia.
nidia kreig
16/07/2018 en 20:34
La gran Lohana Berkins decia «quiero coger con quien quiera, como quiera, donde quieera pero que no medie ni 10 centavos de por medio» porque quien paga manda, impone su sexualildad. Y el derecho al propio placer???
launoeperez
16/07/2018 en 21:14
en todo caso, lo primero que parece es una reclutación de jóvenes para la prostitución. Sabemos (y las chicas de AMMAR no me dejarán mentir) que cada vez las buscan más jovencitas, niñas rayando la pedofilia y que su «vida útil» es cada vez corta. Dicho sea de paso ninguna llegaría a jubilarse cuando los puteros y los fiolos las descarten a los 22
Si vamos a hablar de ESI sería importante introducir la mirada abolicionista porque a las abolicionistas nos gusta cojer en libertad
Gladis
16/07/2018 en 21:39
Cuando hablamos de ESI, nos estamos dirigiendo a niñes y adolescentes, donde sin lugar a duda, la prostitución es violencia. Como docente no podemos llevar un mensaje ilegal, ya que la Argentina es un país abolicionista. Como docente de economía, este señor, debe dar herramientas a sus estudiantes para que la prostitución no sea la única salida de los pibes y pibas pobres. Que AMMAR esté dando talleres en las escuelas, debería ser materia de investigación por parte del Ministerio de Educación y de repudio y denuncia de las organizaciones
El trueno entre las hojas
17/07/2018 en 1:38
No es menor resaltar los comentarios de la nota, ya que son un simple ejemplo de la falta de formación e información docente sobre prostitución.
Asimismo, primero es necesario señalar que los conceptos de trata, explotación sexual, situación de prostitución y trabajo sexual, no son lo mismo. En segundo lugar mencionar que, en Argentina el trabajo sexual no es ilegal pero tampoco es legal, por eso -y entre otras cosas- las leyes anti trata son ineficientes y dejan a las instituciones encargadas de la seguridad pública, el libre albedrío de como hacer cumplir o no Ley 26.842. Es decir, la no existencia de una categoría en el Afip por ejemplo -de personas mayores de 18 años que ejercen de manera voluntaria y autónoma el trabajo sexual – significa otorgarle más poder a las instituciones que, ademas de prever, sancionar y asistir a las victimas de trata, cuiden los negocios ilegales de sus jefes. Por dicha razón no hay que alardear demasiado con que Argentina es abolicionista, porque es más bien un país corrupto.
Por otra parte, las herramientas para que no sea la única salida las debemos otorgar todes, desde el gobierno -cuyos programas para mujeres en situación de vulnerabilidad no funcionan- hasta nosotres, ¿cuantas de ustedes se animaron o se acercaron a preguntarle, a la puta de la esquina, por qué está en calle o si quería algo caliente para pasar el frío de la noche?.
En cuarto lugar, cuando se menciona trabajo sexual o pro-sex, se esta nombrando a personas binarias cis – trans y a no binarias de cualquier clases sociales que prestan diversos servicios -no sólo sexo explicito- por eso mismo, cuidado a la hora de implementar los conceptos.
Por último, a todes nos gusta masturbarnos, coger, gozar, por amor al arte de ser putas en libertad y sin estigmas.
Vero
10/12/2018 en 23:36
El socialismo y progresismo en general quieren manipular las ESI bajo la fachada de informar los métodos anticonceptivos y evitar la violencia de género, etc. pero apenas se observa el detalle promueven sólo del goce, la masturbación, las relaciones promiscuas y el aborto y NADA NADA de hablar de amor, afecto, compromiso, responsabilidad y respeto. Si no se respeta, si no se ama lo único que se promueve es la violencia.