A quince años de la muerte de Sandra Cabrera, dos actividades en Rosario recordarán su vida y lucha y también la impunidad de su asesinato, aún sin responsables para la Justicia. Por un lado, la proyección de la película Sexo, dignidad y muerte, con la presencia de Georgina Orellano, secretaria general de Asociación de Mujeres Meretrices de Argentina (Ammar) y de Myriam Auyeros, fundadora de Ammar Rosario y compañera de Sandra Cabrera. También se convoca a una ronda de mates y charla con trabajadoras sexuales que buscan intercambiar experiencias, denunciar hostigamiento policial y continuar tejiendo redes de contención. Los dos encuentros tendrán como protagonistas a las compañeras de Sandra, tanto las trabajadoras sexuales que compartieron esquina y militancia con ella, como las nuevas, las que la recuerdan y la sienten con emoción. El aniversario de este año del crimen de la dirigente de las meretrices estará atravesado por la denuncia de un recrudecimiento de la violencia institucional hacia las trabajadoras sexuales de Rosario y el país. Pero además, se anunciará que la Policía no pudo aleccionar a las trabajadoras sexuales y Ammar, y que su sindicato, se vuelve a organizar en Rosario.

Sandra Cabrera murió asesinada con un tiro de 9 mm, en la nuca, el 27 de enero de 2004. La mujer, puta y sindicalista, llevaba meses denunciando: primero, la corrupción policial; después, amenazas en su contra. El único imputado y detenido por la causa fue el oficial inspector de la Policía Federal, Diego Parvlusik, que posteriormente fue liberado. El crimen aún continúa impune. Además de luchar por la personería jurídica para su sindicato y obra social para las trabajadoras sexuales, Sandra Cabrera fue la ideóloga e impulsora del proyecto de ley que apuntaba a modificar los artículos del Código de Faltas santafesino que, hasta el momento, criminalizaban la prostitución y el travestismo en la vía pública. Los códigos fueron derogados recién en 2010.

“Es una fecha que nos conmueve”, dijo Merlina, trabajadora sexual y militante, a El Eslabón. “A Sandra la recordamos como una luchadora y un ejemplo, un ícono que debería movilizar a todes, porque más allá de que estés a favor o no del trabajo sexual, lo que nosotros ponemos en jaque es una realidad: las trabajadoras existimos y vamos a seguir ejerciendo lo que nosotros queremos”. Merlina sostuvo que el debate ya no tiene que ser trabajo sexual sí o no, el debate tiene que ser las condiciones de clandestinidad y persecución que viven quienes lo ejercen.

Ni Merlina ni sus compañeras de militancia conocieron a Sandra Cabrera. Saben, sin embargo, que el de ella no es el único caso. “Aún hoy en territorio escuchamos a las compañeras y nos cuentan que la policía las sigue hostigando, violentando, coimeando, las corren de la esquina. Nunca se terminó la violencia de la policía hacia las trabajadoras sexuales, y si bien Sandra es un ícono, hay que recordar también a la cantidad de compañeras asesinadas y por las que no hay justicia”, remarcó. Y sumó un dato: del 1996 a 2016 hay registrados 44 asesinatos a trabajadoras sexuales, de los cuáles sólo el 10 por ciento concluyeron con condena a los culpables.

“No pudieron aleccionarnos”

Georgina Orellano

Georgina Orellano es la secretaria general de Ammar a nivel nacional. Desde hace años, viaja a Rosario cada 27 de enero para formar parte de los actos que se hacen para recordar a Cabrera. Pero también vuelve más de una vez a lo largo del año: el objetivo es reorganizar a las trabajadoras sexuales en la ciudad y que el gremio vuelva a funcionar. Según adelantó a este medio, las viejas y nuevas compañeras de Sandra ya están trabajando en organizarse bajo el ala sindical local.

Este lunes 28 de enero, a las 19, Orellano estará en La Toma (Tucumán 1349) junto con Myriam Auyeros, fundadora de Ammar Rosario y compañera de Sandra Cabrera. Además, se proyectará la película “Sexo, dignidad y muerte”, de Lucrecia Mastrángelo. “Es importante viajar cada año para dando a conocer sobre todo a las nuevas generaciones de feministas quién fue Sandra Cabrera”, explicó la sindicalista. Para Orellano, es importante destacar que a 15 años del crimen, la lucha de las trabajadoras sexuales no cambió, y que además de la lucha por la obra social y la jubilación, todavía la pelean día a día para ponerle freno a la violencia policial. Además, recordó que en los últimos años, la crisis no sólo implicó que más mujeres y travestis se vuelquen al trabajo sexual, sino que le abrió la puerta al recrudecimiento de la represión y el abuso de las fuerzas de seguridad.

El asesinato de Sandra Cabrera significó ya no el fin, sino una pausa en el trabajo sindical de Ammar en Rosario. “Sentimos que nos quisieron aleccionar, que nos dijeron que si nos organizamos vamos a terminar como ella. Por eso fue muy difícil volver a organizar a las compañeras. Volvió el miedo a la visibilización, a la organización”, indicó Orellano. Sin embargo, la nueva generación de trabajadoras sexuales comenzó a visibilizarse y estar presentes en espacios de militancia política y feminista y lo cambiaron todo. “Eso fue lo que trajo las ganas de volver nuevamente a la militancia: saber que tienen apoyo, que hay también una transformación social. Entonces esas compañeras que en su momento se fueron por miedo, hoy vuelven nuevamente a organizar Ammar Rosario”, destacó la sindicalista.

Contra el desamparo, organización

Merlina tiene 26 años, es trabajadora sexual y militante de Fuertsa, un frente conformado por trabajadoras sexuales y militantes de otras ramas que empatizan con la lucha de las putas y van a la par de sus reclamos. Fuertsa Rosario se ocupa de recorrer territorios, conocer a las compañeras y sus problemáticas, visibilizar y romper estigmas. En ese sentido, Merlina acompañó la denuncia del recrudecimiento de la violencia institucional contra las trabajadoras sexuales y la clandestinidad a la que cada vez están más expuestas. “Es un desamparo social mucho más grande. Si bien ya por el hecho de ser mujer o cuerpo feminizado sos vulnerable, nosotras no podemos ir a hacer denuncias, porque esa misma institución es la que nos persigue”, explicó Merlina.

“Nosotras le encontramos una salida en la organización”, remarcó la joven. Y en ese sentido explicó: este domingo, desde las 18, Fuertsa Rosario convoca a recordar a Sandra Cabrera con una ronda de mates y charlas en el Parque España. La actividad no se suspende por lluvia, sino que se cambiará de lugar.

“Invitamos a que se acerquen y nos escuchen, que se puedan sumar a una red. Para nosotras es muy importante saber que no estamos solas, que somos un montón y que organizándonos podemos continuar haciendo nuestro trabajo y manteniéndonos seguras. Las trabajadoras sexuales sexuales unidas hacen que podamos sentir más fuerza y no tanto desamparo”, concluyó.

Fuente: El Eslabón

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