El candidato a la Intendencia presentó un proyecto para elevar el rango de la actual Dirección de Empleo con el objetivo de fomentar la creación de nuevos puestos de trabajo y combatir la precarización laboral desde el municipio.
El candidato a Intendente por el Frente Juntos Roberto Sukerman presentó un proyecto para crear la Secretaría de Trabajo en el ámbito de la Municipalidad de Rosario, con el objetivo de fomentar el derecho al trabajo en condiciones dignas y combatir la creciente precarización laboral.
“Es imperioso tomar esta medida. 2018 fue el primer año en mucho tiempo en que disminuyó el trabajo registrado ante la fuerte destrucción de puestos de empleo en el sector privado”, explicó el actual concejal.
Sukerman remarcó que “el sector público no desempeñó un rol contracíclico, sino que por el contrario actúo de manera absolutamente pasiva”. Al mismo tiempo, señaló que no sólo se destruyeron fuentes laborales, sino que también la calidad de las ofertas se encuentra afectada: “El surgimiento de las mal llamadas economías colaborativas esconden formas precarización que requieren mejores y más ingeniosos controles por parte de los diferentes niveles del Estado”, indicó.
En tanto, el candidato hizo hincapié en los últimos datos del Indec que muestran a Rosario como una de las ciudades más afectadas del país por la crisis económica: “Tenemos la mayor tasa de desempleo del país con un 12.8%, la más elevada en los últimos trece años. Esto significa que 78 mil rosarinos y rosarinas actualmente sufren las consecuencias del desempleo”.
La iniciativa prevé además la descentralización territorial de la capacitación laboral: “Actualmente observamos que la mayor parte de las capacitaciones en oficios ocurren en el centro y no llegan a los barrios. Vamos a plantear un esquema con mayor equidad territorial para generar igualdad de oportunidades”, apuntó.
El proyecto contempla también mejorar las herramientas de inclusión laboral para personas con discapacidad, y profundizar la capacitación para la reinserción laboral en personas mayores de 40 años que perdieron su empleo.
