Yo no sé, no. Manuel no tenía consuelo esa primera semana de septiembre. Había comenzado el segundo cuaderno Campeón, de 42 hojas tapa dura, y en la primera redacción que hizo para la clase de Lengua se comió la “p” de septiembre y la seño se lo marcó en rojo.

Pedro, Carlos, Tiguin, Raúl, Juanchila, José y yo le decíamos que para que no le pasara más tenía que acordarse que septiembre tenía una “p” de…  para Juanchila, la “p” de paraíso, por el que teníamos en Iriondo casi Rivas y que todos los años nos abastecía de municiones (los venenitos). Para José, la “p” era de pescar y para Tiguín de pasaje y de Puma, por la moto. Para Raúl, de poste, ese mismo que en la cancha chica de El Trébol le había impedido gritar gol en una final contra los de Biedma. Para Carlos, de presencia y pensamiento. Para Pedro era la de pronunciar peronismo (en homenaje a su abuela) y poesía, y para mí, de pan, pasión, pérdida.

Manuel se entusiasmó con ese ayudamemoria y fue por más. Empezó a preguntarles a los vecinos por la “p” de sus vidas. Viborita, el verdulero, le dijo la “p” de papas; el Gringo, de pasteles; para don Feresin, el que te curaba los nervios, la “p” era de palabra y de presagio. La Susi le había dicho, sentada en el tapialito y mientras se acomodaba el flequillo, que la “p” era de pelos y paciencia; para el Patito Acuña la “p” era de pisadas (porque la pisaba lindo en el mediocampo); para Graciela, de postura, y para Anita, de papá.

Pasó una semana y Manuel escribió en el cuaderno de Lengua: “A veces a septiembre le falta la p y es porque se queda con nosotros juntando los venenitos del paraíso o jugando a las bolis en el pasaje, o en la última pelota que pegó en un poste, o en el arroyo con José pescando. A veces se queda distraída en algún que otro pensamiento, en una poesía, en alguna pasión, y a veces se queda con Anita que espera por su papá.

Septiembre tiene una p que va y viene”. Y termina diciendo: “Yo sé que por ahora la “p” de septiembre tiene que estar ahí, quietita, pero yo le doy permiso, permiso para que, con mis amigos, recorra el barrio”.

Nota publicada en la edición impresa del semanario El Eslabón del 09/09/23

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