Por Carlos del Frade. Cuando mi mamá, la Pochi, hija de trabajadora doméstica y de Don Alfredo, estibador pobre del puerto rosarino, escuchaba esa voz penetrante, salía de la cocina y no podía gambetear el llanto.

Somos una lista integrada por ciudadanos que nunca ocuparon cargos públicos ni políticos, pero que creemos que la política y el voto democrático es la única forma de cambiar la realidad para vivir y convivir mejor.

El desproporcionado aumento de los precios es por la total desregulación del mercado inmobiliario, que permite que las propias cámaras inmobiliarias, sin ningún tipo de control, fijen valores a su antojo.