Soldados israelíes luchaban con militantes de Hamas, manteniendo la presión militar sobre el grupo islámico, pero evitando una operación urbana que complicaría los esfuerzos diplomáticos para poner fin a la guerra en Gaza.
Funcionarios médicos dijeron que la cifra de muertos palestinos en la ofensiva que Israel comenzó hace 17 días había superado las 900 personas e incluían al menos 380 civiles. El Estado judío afirma que 13 israelíes, de los cuales tres eran civiles alcanzados por cohetes y 10 soldados, perdieron la vida.
En las líneas de combate de los suburbios de una Gaza llena de escombros, los soldados israelíes y milicianos de Hamas seguían con los combates.
Residentes y periodistas locales dijeron que las tropas israelíes y los tanques habían tomado posiciones en áreas abiertas, buscando penetrar en las defensas de la guerrilla en zonas edificadas, donde hay bombas trampa, francotiradores y combatientes con lanzagranadas.
Entre los objetivos de los ataques aéreos han estado las casas de líderes de Hamas, que según Israel contienen arsenales de armas.
Un portavoz del Ejército israelí dijo que enviaron reservistas del Ejército a la ofensiva de Israel con el objetivo declarado de detener los ataques con cohetes desde el territorio controlado por Hamas a través de la frontera.
Pero las fuerzas israelíes se resistían a iniciar la tercera etapa de su asalto más violento contra militantes palestinos en décadas: un avance sobre Ciudad de Gaza y otras áreas urbanas para aumentar la efectividad de la campaña aérea y la ofensiva terrestre.
En una conferencia de prensa en Washington, el presidente estadounidense, George W. Bush, dijo que espera que la violencia termine antes de que Barack Obama asuma el cargo el 20 de enero.
"Estoy a favor de un alto el fuego sostenible, y una definición de alto el fuego sostenible es que Hamas deje de lanzar cohetes contra Israel", afirmó. Agregó que el Estado judío tiene el derecho de defenderse, pero que debe ser consciente de las "personas inocentes" en la Franja de Gaza.
La ministra de Relaciones Exteriores israelí Tzipi Livni, candidata a primera ministra en las elecciones del 10 de febrero, dijo que el bombardeo sorpresivo en la Franja de Gaza al comienzo de las operaciones el 27 de diciembre y la ofensiva terrestre una semana después habían "restaurado la disuasión de Israel".
En una entrevista con la Radio del Ejército, la ministra declinó decir cuándo Israel terminará su ataque, que según autoridades médicas ya ha dejado cerca de 900 palestinos muertos, muchos de ellos civiles.
Fuentes políticas indicaron que Livni, jefa del oficialista Partido Kadima, y el ministro de Defensa, Ehud Barak, presidente del Laborismo de centroizquierda, querían terminar con la operación en el territorio controlado por Hamas lo antes posible.
Pero las fuentes dijeron que el primer ministro saliente, Ehud Olmert, que renunció como jefe de Kadima en septiembre, estaba en desacuerdo y planeaba presentar la cuestión en un foro de gabinete en el que tiene apoyo.
En episodios violentos el lunes, las fuerzas israelíes mataron a un militante palestino y a cuatro civiles, dijeron trabajadores médicos.
Soldados israelíes lucharon contra militantes de Hamas en el este y norte de Ciudad de Gaza, en combates que algunos residentes calificaron de feroces.
El Ejército israelí dijo que sus aviones realizaron más de 10 ataques durante la noche, menos que los días previos, que hicieron blanco en militantes de Hamas, depósitos de armas, un sitio de lanzamiento de cohetes y un túnel de contrabando debajo de la frontera de Gaza con Egipto.
NEGOCIACIONES POR TREGUA
La cifra de muertos palestinos desde el comienzo de la ofensiva israelí alcanza las 909 personas, muchas de ellas civiles, dijeron funcionarios médicos de Gaza. Unos 3.600 palestinos resultaron heridos.
El ministro de Sanidad del gobierno de Hamas en Gaza, Basem Naim, dijo a los periodistas que el 42 por ciento de los muertos – o casi 400 – eran mujeres y niños. Israel, que dice que ha matado a "cientos" de combatientes, ha cuestionado las cifras de muertes civiles de Gaza, pero no ha ofrecido su propia estimación.
Periodistas de Reuters que cubren los ataques y las instalaciones hospitalarias han visto decenas de cadáveres de mujeres y niños. Israel ha acusado a Hamas, que opera en zonas densamente pobladas, de usar a civiles como escudos humanos.
La agencia de noticias oficial de Egipto, MENA, dijo que el lunes estaban previstas más conversaciones sobre un plan de cese del fuego en El Cairo con una delegación de Hamas.
MENA citó a una "fuente oficial" diciendo que las discusiones del domingo entre el jefe de inteligencia egipcio Omar Suleiman y funcionarios de Hamas habían sido positivas.
Israel, que rechazó la resolución de cese del fuego de la ONU de la semana pasada como impracticable, quiere detener los ataques con cohetes y que se tomen medidas para impedir que Hamas se rearme a través de túneles transfronterizos.
El líder de Hamas, Khaled Meshaal, dijo que el grupo islámico no considerará un cese del fuego hasta que Israel ponga fin a su ataque aéreo, marítimo y terrestre y levante su bloqueo de Gaza.
(Reporte adicional de Adam Entous en Jerusalén, escrito por Jeffrey Heller. Editado en español por Gabriela Donoso)
Por Nidal al-Mughrabi
GAZA (Reuters) –
