El “Sí” al proyecto de Constitución Política del Estado (CPE) impulsada por el presidente indígena Evo Morales cosechaba el 58 por ciento de los votos mientras que el “No” quedaba rezagado con el 41 por ciento, según los datos difundidos por el diario paceño La Razón. En tanto, el 78 por ciento de los votos válidos en el referéndum establecía que la tenencia de tierras en ese país no debe superar en ningún caso las 5 mil hectáreas de propiedad, aplastando la propuesta de que los latifundios alcancen las 10 mil hectáreas. Una muestra de que a Bolivia le falta un Eduardo Buzzi que apueste a “desgastar” al gobierno popular de Evo. “Hoy, 25 de enero de 2009, se refunda una nueva Bolivia con igualdad de oportunidades para todos los bolivianos. Aquí se acabó el Estado colonial”, exclamó Morales antes miles de ciudadanos reunidos en la plaza Murillo del centro de La Paz.
Las primeras encuestas de boca de urna revelaron la victoria de la propuesta del presidente de Bolivia en el referendo que se llevó a cabo en ese país. El diario paceño La Razón le dio un 58 por ciento al “Si” y 41 al “No”, mientras que el canal televisivo ATB dio un 63 por ciento a favor de la reforma y un 34 en contra.
Simultáneamente, la mayoría de los bolivianos –alrededor del 78 por ciento según La Razón– se pronunció este domingo por limitar a 5 mil hectáreas la extensión máxima legal de la propiedad de la tierra, ante la otra opción que era permitir que alcanzase las 10 mil, informó la agencia noticiosa italiana Ansa.
Morales proclamó su prometida "refundación" del país tras aprobarse la nueva Constitución y afirmó que ya "no hay ninguna media luna".
"Hoy, 25 de enero de 2009 se refunda una nueva Bolivia con igualdad de oportunidades para todos los bolivianos. Aquí se acabó el Estado colonial", dijo Morales a una multitud que colmó la Plaza Murillo en el centro de La Paz, informaron despachos de las agencias noticiosas Ansa y DPA.
Morales enfatizó que ahora en Bolivia "no hay ninguna media luna", en referencia a la región que es bastión de la oposición, pues con la nueva Constitución "ahora hay luna llena, la unidad de todos los bolivianos y todas las bolivianas".
"Empieza la nueva Bolivia, un nuevo estado nación para llegar a la igualdad de todos los bolivianos y bolivianas", insistió. Al agradecer el respaldo que este domingo recibió su propuesta de nueva Constitución, clave para su prometida "refundación" del país, Morales mencionó a los movimientos sociales y a la Central Obrera Boliviana.
También hizo un llamado a prefectos y alcaldes para conformar un "consejo de autonomías", para aplicar lo que establece al respecto la nueva Constitución que además, no permite que los servicios como agua, electricidad y comunicación sean en adelante objeto de lucro privado.
En otro pasaje de su discurso, el presidente de Bolivia exclamó que "se acabó el latifundismo, se acabó los terratenientes", en referencia a que los bolivianos definieron en 5 mil hectáreas la extensión máxima de la propiedad agrícola en el referendo dirimitorio del artículo 398 de la nueva Constitución.
El presidente Morales fue ratificado en su cargo el 10 de agosto pasado con el 67 por ciento de los votos y esperaba, según sus propias declaraciones, mantener o superar esa marca en el referendo constitucional.
De este modo, de mantenerse porcentajes de apoyo a la nueva Constitución inferiores a aquel 67 por ciento sería leído por la oposición como un debilitamiento del gobierno, según lo señalaron aún antes del referendo varios analistas y dirigentes vinculados a los sectores oligárquicos que desprecian a Morales.
Por otra parte, los primeros resultados por departamento (provincia) dieron el triunfo del “No” en aquellas regiones gobernadas por prefectos opositores: Santa Cruz, Tarija, Beni, Pando y Chuquisaca, la zona más rica de Bolivia conocida como la Media Luna.
El dirigente cívico cruceño Branko Marinkovic, aludió a la posibilidad de que el gobierno recurriera al fraude, pero llamó sin embargo a participar masivamente del referendo. Los resultados muestra que su prédica no conmovió a las mayorías.
El gobierno rechazó la posibilidad del fraude, algo que fue ratificado por los primeros informes de la jornada de los observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) que aludieron a la normalidad de los comicios. Las oligarquías no suelen tener fortuna en las urnas, aunque sí en los medios de comunicación.
Pero Marinkovic y otros legisladores opositores advirtieron la semana pasada que si el proyecto de Constitución era rechazado en un solo departamento, perdería "legitimidad" y por lo tanto no podría se aplicada en el país. Todo un ejemplo de democracia.
Lo que también llamó la atención de los analistas es la mayor contundencia del referendo "dirimitorio" del tema agrario en lo que hace a la extensión de tierras a partir de la cual, para el futuro, una propiedad será considerada latifundio y, por lo tanto pasible de expropiación.
En esta materia, cerca del 78 por ciento de los votantes redujeron a 5 mil hectáreas el máximo legal permitido para la propiedad agraria. Un evidencia de cuánto le hace falta un Buzzi al rico y racista Chaco Boliviano.
