La organización separatista vasca ETA detonó este miércoles un potente coche bomba cerca de un cuartel donde viven policías y sus familias en Burgos, norte de España, y causó heridas leves a 54 personas, a dos días del 50 aniversario de su fundación.
La camioneta bomba, cargada al parecer con hasta 500 kilos de explosivos, estalló a las 3.45 hora local (22.45 de este martes en Argentina) sin previo aviso, y el ataque fue inmediatamente atribuido a ETA por la policía y el gobierno. En total, 54 personas entre agentes de la Guardia Civil y familiares –mujeres y niños– sufrieron “heridas leves” como consecuencia de la explosión, dijeron fuentes del Servicio de Sanidad de Castilla y León.
Las víctimas presentaron principalmente cortes y heridas de poca consideración, aunque dos personas están internadas, una con un traumatismo y otra con una crisis de ansiedad, concretaron las mismas fuentes.
La explosión de la furgoneta bomba, que estaba en la parte posterior del edificio donde dormían los agentes y sus familias, dejó un cráter en el suelo de siete metros de diámetro y dos de profundidad y afectó las catorce plantas de la casa cuartel, las primeras de las cuales quedaron prácticamente destruidas.
Unas 118 personas fueron evacuadas de la casa cuartel y las viviendas colindantes, afirmó el delgado del gobierno español en Castilla y León, Miguel Alejo, en declaraciones radiales.
Por su parte, el presidente del gobierno regional de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, aseguró que “ETA visitó Burgos con intención de matar y hacer el mayor daño posible”.
También el vicepresidente tercero del gobierno español y Ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, afirmó que la organización separatista buscaba “una matanza indiscriminada”.
El ministro del Interior español, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el Secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, se trasladaron al lugar del atentando, desde donde darán a conocer detalles de lo ocurrido.
El cuartel de la Guardia Civil de Burgos había sido señalado como blanco por el comando Vizcaya, desarticulado en julio de 2008, según los datos de la investigación dirigida por el juez Baltasar Garzón.
El último atentado con un coche bomba perpetrado por ETA tuvo lugar el 9 de julio contra la sede del Partido Socialista vasco (PSE) en localidad vasca de Durango y causó daños materiales pero no víctimas. Pocos días antes, el 19 de junio, ETA había asesinado a Eduardo Puelles uno de los jefes de la lucha antiterrorista en el País Vasco, colocando una bomba debajo de su auto.
Desde su fundación el 31 de julio de 1959, ETA mató a 856 personas en su lucha por un Estado vasco independiente en el norte de España y sur de Francia, según cifras del gobierno.
(Fuente: Télam)
