Central cayó 2 a 0 ante River como visitante en la segunda fecha del Campeonato de Primera División y estiró su período negativo de 17 años sin ganar en el estadio Monumental. Teo y Pisculichi marcaron para la victoria millonaria.
Desconcentración, desorden, imprecisión fueron factores que le imposibilitaron al Canaya hacer pie durante el encuentro, que tuvo a un River muy agresivo y con varias posibilidades en la portería rival.
Salvo una corajeada del Loncho Ferrari en el inicio del partido que finalmente no quedó en nada porque Carlos Sánchez desbarató cualquier chance de gol, todo lo positivo que se observó fue del dueño de casa, que manejó el partido a su merced.
A los 16’ Teófilo Gutiérrez aprovechó un buen centro de Leonel Vangioni, y en soledad en el área chica definió ante Mauricio Caranta, que nada pudo hacer para impedir el primer grito de la tarde.
Lejos de cualquier tipo de reacción, el auriazul siguió sin encontrar la pelota. Ambos laterales de la cancha tenían vía libre para los jugadores millonarios. Ni Ferrari ni Delgado pudieron controlar los avances del Piri Vangioni por izquierda, y Sánchez y Mercado en el sector opuesto.
La falta de precisión de los dirigidos por Miguel Russo hacía incontrolable las arremetidas de River, que en los pies del delantero colombiano estuvo cerca de estirar la ventaja, pero en esta ocasión el duelo quedó para el arquero. También tuvo su chance Ariel Rojas que quedó con el arco solo, pero la falta de ángulo no le permitió definir cómodo y su remate terminó estrellándose en el palo.
El flojo desempeño de la visita, hizo que el entrenador moviera el banco y al cumplirse la primera media hora de juego, Pablo Becker ya había reemplazado en el mediocampo a Antonio Medina. En tanto, a disputar la etapa complementaria saltó Fernando Barrientos en lugar de Nery Domínguez.
Evidentemente, el nulo manejo de la pelota que tuvo el sector de volantes era la cuestión que más le preocupaba a Russo, y de ahí las modificaciones tempranas, que finalmente no tuvieron el efecto deseado por el técnico.
En el inicio del segundo tiempo se vio algo más de paridad, más por que el equipo del Muñeco Gallardo sacó el pie del acelerador que por avances claros de Central, que sólo siguió con vida por la mínima diferencia que existía en el tanteador. A los 26’, el árbitro Diego Abal no consideró penal un golpe con el hombro del arquero Julio Chiarini a Franco Niell que lo había anticipado dentro del área.
Esa vida que tenían los de Arroyito iba a durar hasta los 34’, cuando otra desconcentración en el fondo le permitió a Leonardo Pisculichi quedar mano a mano con la defensa ante un saque de arco para sellar con una gran definición el triunfo definitivo.
Central la pasó mal en su excursión al Monumental, donde extiende su mala racha de 17 años sin festejar. Nunca le encontró la vuelta al partido, mostró una pálida imagen y se vio claramente superado por el último campeón del fútbol argentino.
