Un amor redondo
En el inicio del juicio y en su posterior absolución, dos días después, Higui de Jesús no soltó la pelota. ¿Por qué? “A mí el fútbol me ordena. Me maneja la pelota”. Por eso. “Sin la pelota como guía me perdí”.
En el inicio del juicio y en su posterior absolución, dos días después, Higui de Jesús no soltó la pelota. ¿Por qué? “A mí el fútbol me ordena. Me maneja la pelota”. Por eso. “Sin la pelota como guía me perdí”.