El periodista y abogado Pablo Llonto, el fiscal federal Adolfo Villate y la abogada (e integrante de HIJOS Rosario) Nadia Schujman, debatieron sobre el “presente y los desafíos de los juicios de lesa humanidad en la Argentina”. La actividad tuvo lugar viernes en la Facultad de Derecho y estuvo organizada por el Centro de Estudios e investigaciones en Derechos Humanos Juan C. Gardella (CEIDH) de la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Rosario (UNR).
El panel estuvo coordinado por el abogado e integrante del CEIDH, Vildor Garavelli, que luego de habilitar la palabra a los representantes de la secretaría de derechos humanos del centro de estudiantes de Derecho, fue presentando a los distintos expositores.
El primero en hablar del panel fue el fiscal Villate, quien tras hacer un repaso de la actividad de articulación para la investigación con diferentes áreas de del ejecutivo nacional en los últimos años, reconoció que “la respuesta a los requerimientos de la fiscalía por parte de los ministerios no es la misma” en el nuevo contexto político. “Las políticas de derechos humanos que lleven adelante los distintos estamentos del Estado son fundamentales para avanzar en los juicios”, remarcó el fiscal.
Villate describió algunas de las investigaciones que están llevando adelante desde la fiscalía, entre las que destacó la “del vaciamiento de la Biblioteca Vigil” y la represión en Acindar: “en el Villazo vamos a investgar las conexiones de civiles como Martinez de Hoz en su concreción”.
Adolfo Villate es el fiscal a cargo de la Procuraduría de crímenes contra la humanidad de Rosario, dependiente del Ministerio Público Fiscal Federal.
Luego fue el turno de la abogada del equipo jurídico de Hijos y también integrante de CEIDH, Nadia Schujman, quien planteó que “los juicios no sirven si se quedan entre las cuatro paredes de un tribunal, sirven para comprender nuestro presente”.
Ante el nuevo contexto político, la abogada también apuntó que “es más necesario que nunca que estemos unidos todos para dar la pelea en la calle”. “Entiendo que hemos logrado muchas conquistas en estos años y debemos seguir avanzando sobre los actores civiles”, refirió.
Schujman comparó la pérdida del rol promotor en los juicios por parte de ejecutivo actual con la sostenida hasta diciembre pasado. “Estos últimos años sí hubo voluntad política para que los juicios avanzaran”, subrayó, la abogada.
Por último Pablo Llonto reivindicó la necesidad de realizar encuentros y chralas sobre la temática de apoyo a los juicios a los represores. “Cada juntada, cada uno de los espacios son los ladrillos que construyen la muralla de la democracia y los derechos humanos, que hoy es atacada”, propuso.
El abogado y periodista comentó la reunión de la Comisión Interpoderes realizada días atrás, que destacó como un paso positivo, aunque reclamó “acciones concretas de la Corte Suprema para avanzar en los juicios” y recordó que “en el juicio a las juntas pasaron 833 testigos en 3 meses porque existió la decisión del poder judicial para avanzar”.
Llonto también se refirió a las agresiones a la lucha por memoria, verdad y justicia de diferentes representantes del gobierno nacional, sobre quienes dijo “no tienen ni idea de lo que hablan”, y señaló: “Cuando terminen los juicios sabremos que la magnitud del terrorismo de Estado fue mucho mayor de lo que pensamos”.
