En el Reino Unido, y muy especialmente es su capital, Londres, hay una gran concentración de multimillonarios. Porque, aunque no sea tan célebre como Panamá, las Islas Caimán, y el estado de Delaware (EEUU), la City londinense es un gran refugio para el dinero de evasores y especuladores de todo el mundo.
El impacto de la pandemia, como en todos los países del mundo, tuvo graves consecuencias económicas en las arcas británicas. La respuesta del gobierno del primer ministro, Boris Johnson, fue acelerar la propuesta de implementación de un nuevo impuesto a las grandes fortunas.
El proyecto cuenta con un abrumador apoyo popular: 61 por ciento de los encuestados quieren que los más ricos paguen más impuestos.
El sondeo, realizado por YouGov a mediados de mayo, mostró que ese porcentaje de británicos estaba a favor de un nuevo impuesto sobre el patrimonio para las fortunas de más de 750 mil libras.
Reino Unido contabiliza 147 multimillonarios y Londres mantiene su estatus de capital mundial de los magnates, según informó el sitio de noticias Bae Negocios.
La idea es crear una nueva legislación para lograr atenuar el impacto recesivo que produjo la cuarentena en la economía local.
Londres fue literalmente tomada por los multimillonarios. La lista es muy extensa y la encabeza James Dyson, con una fortuna estimada en 16.200 millones de libras, señaló Bae Negocios.
“El dinero sigue lloviendo en la cima”, advirtió el profesor de la Universidad de Sheffield, Rowland Atkinson, autor de un libro donde afirma que Londres fue invadida y “capturada” por los multimillonarios: Alpha City: How London Was Captured by the Super-Rich (Ciudad Alpha: Cómo Londres fue capturada por los super-ricos).
Además, como también sucedió en otras latitudes, algunos multimillonarios fueron acusados de querer aprovecharse de las ayudas públicas, recurriendo a préstamos o sistemas de desempleo parcial, para redondear sus negocios.
Por ejemplo, Greenpeace elevó un pedido de informe sobre Richard Branson, fundador de Virgin, por no haber pagado impuestos en el Reino Unido durante 14 años y exigir, durante el momento más agudo de la crisis sanitaria, un salvataje estatal para su aerolínea Virgin Atlantic.
Con la reciente salida de la comunidad europea, el gobierno de Johnson destina miles de millones de libras para amortiguar el choque y evitar un daño social excesivo, sin embargo el déficit se disparó cerca de 300 mil millones de libras en un año.
El desempleo crece. Se espera una recesión sin precedentes, y en ese marco los analistas dan como un hecho el impuesto a los ricos.
“En el contexto actual, no veo apoyo político para más recortes”, afirmó el profesor de la Universidad de Warwick, Arun Advani, citado por Bae Negocios.
“El gobierno ha demostrado que puede hacer algo radical ahora, como financiar el desempleo parcial o apoyar a los trabajadores autónomos. Soy optimista en que va a hacer nuevas propuestas para aumentar los impuestos a los más ricos”, agregó el académico.
Fuente: El Eslabón
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