En diálogo con Noticias Piratas, (programa producido en Radio Universidad por la cooperativa La Masa, al igual que este diario digital), el periodista de Página 12 Horacio Verbitsky analizó este sábado el fallo de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que otorgó el beneficio del 2 x 1 a un represor de la dictadura, al que calificó como “vergonzoso”.
“Es un fallo vergonzoso que deja en evidencia, línea por línea, su intencionalidad política, por la falta de consistencia jurídica”, planteó el experimentado periodista y además presidente del Centro de Estudios Legales y Sociales (Cels).
“A mi me asombra que jueces, de la trayectoria, de la formación de (Elena) Highton y (Carlos) Rosenkrantz, por ejemplo, hagan un fallo hablando durante fojas y fojas del delito permanente, y no digan cuál es el delito permanente que habría en este caso. Y no lo pueden decir porque no hay ninguno”, dijo Verbitsky, y añadió: “Es insólito, yo estoy estupefacto por ese fallo”.
El periodista consideró que en su resolución los jueces “han forzado las cosas buscando, de cualquier manera, darle una apariencia jurídica a una decisión que es fundamentalmente política”.
Verbitsky observó que hay cuatro fallos claves de los últimos tiempos que deben analizarse en conjunto con el del 2 x 1, que tienen como constante es que “la mayoría la forma Rosenkrantz”. Para el columnista de Página 12 “Rosenkrantz es el nuevo hombre fuerte de la Corte”.
“Hay un desplazamiento de poder, de (Ricardo) Lorenzetti a Rosenkrantz. ¿Y quien es Rosenkrantz? El abogado de Clarín”, remarcó el autor de Robo para la Corona.
“Este es un fallo que de jurídico tiene muy poco, es esencialmente político”, insistió el periodista, y se mostró convencido que la movilización convocada por los organismos de derechos humanos para el próximo miércoles, en repudio a la resolución de la Corte, «será contundente en todo el país».
“Me parece que no dimensionaron la repercusión que iba a tener. Me da la impresión de que han tirado un búmeran y ahora están asustados porque ven que vuelve”, evaluó Verbitsky en otro tramo de la extensa entrevista. Y apuntó: “Les sale el tiro por la culata, cosa que ya ocurrió en 1986 con la ley de Punto Final, una ley que intentó cerrar los juicios y que en realidad los multiplicó al infinito”.
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