“El que está detrás de todo es Pullaro”
El ex ministro Marcelo Sain y el abogado Juan Lewis coinciden en el móvil político de la causa por “espionaje”, que volvió al ruedo tras dos años de parálisis procesal y mediática.
El ex ministro Marcelo Sain y el abogado Juan Lewis coinciden en el móvil político de la causa por “espionaje”, que volvió al ruedo tras dos años de parálisis procesal y mediática.
En medio de cambios drásticos para el oficio, la tarea periodística se precariza y empobrece en un contexto de despidos y cierre de medios públicos. Milei cree en la libertad, salvo la de expresión.
De la mano de Tinelli, Gustavo Scaglione descubrió América. Comunicación, poder y concentración de la propiedad de los medios. El mundo de las finanzas y la lógica mercantil de la información.
Cuando no cómplice, la dirigencia política se muestra resignada ante el poder de los grandes grupos mediáticos, siempre reticentes a transformaciones en favor de los intereses populares.
El inicio del juicio por la megacausa de estafas inmobiliarias y las coberturas periodísticas. Consecuencias de un pulpo mediático. Poderosos sin nombres pero con influencias. Y un fiscal con impronta personal.
El portal digital de Gustavo Scaglione, Rosario3, borró la nota de Télam con declaraciones de Nadia Schujman, en la que acusa al titular del multimedios. “Fin de la Libre Expresión”, señaló el periodista Claudio Andrés De Luca.
Las imputaciones a Sain y su equipo y la lista de querellantes constituyen la foto de la disputa política de los últimos años. Ganadores y perdedores provisorios. Perfiladores buenos y malos.
Pese a los reclamos de políticas públicas a favor de la pluralidad de voces, la distribución de la publicidad oficial sigue favoreciendo a grupos mediáticos monopólicos como el que reina en Rosario.
El pedido de suspensión por 150 días de la fiscal Ferraro, que dejó que se evaporaran millones de pesos y dólares en el caso Oldani, contrasta con la tajante decisión parlamentaria que destituyó a Sain.
La defensa de los sospechados por “espionaje ilegal” pide a gritos el control de un magistrado en la investigación del fiscal Hernández. Pero no consigue. Irregularidades y filtraciones interesadas.