La inmunidad del negacionismo
Cacerola en mano, sin barbijo y amontonándose en festicholas o en clases, la muerte resiste. Alentada por quienes no acatan las medidas y siguen los dictámenes de la oposición y los medios.
Cacerola en mano, sin barbijo y amontonándose en festicholas o en clases, la muerte resiste. Alentada por quienes no acatan las medidas y siguen los dictámenes de la oposición y los medios.
Yo no sé, no. Pedro acordaba escaparse con Josecito para hacer la heroica de colgarse de un tranvía, ya que por esos meses dejarían de funcionar.
El reconocido historietista y narrador Renzo Podestá fue el primer ilustrador de El Eslabón. Recuerda los caóticos pero divertidos comienzos y los teléfonos intervenidos por una nota a un funcionario reutemista.
Para Diego Colomba, poeta, ensayista y profesor, su trabajo en este periódico, desde 2000 a 2008, tuvo una fuerte conexión con su desarrollo como narrador. Recuerdos y anécdotas de una aventura periodística.
Silvio Moriconi fue el primer fotógrafo de la redacción de este periódico y recuerda que había que contar los clics para no desperdiciar material e improvisar en cualquier rincón un laboratorio para revelar. Lo único que sobraba e
Rosario a finales de los 90 y principios de los 2000, gestaba varias movidas artísticas y políticas que no tenían eco en los grandes medios pero sí en este periódico, recuerda y valora Virginia Giacosa, ex integrante eslaboniana p
Daniel Yayo Ekdesman, comunicador, docente y protagonista del Proyecto Miradas, fue parte de la redacción eslaboniana en sus inicios. Recuerda a los “periodistas clandestinos” que colaboraban y destaca cómo se conectaron tareas y
Vanina Cánepa, periodista y productora audiovisual, fue integrante de la redacción en los comienzos de este medio.
Leandro Arteaga, periodista, docente, crítico de cine, fue parte de la redacción eslaboniana en los inicios. Destaca que este periódico dio cobertura a la movida cultural local en momentos difíciles.
La cronista Florencia Coll, hoy radicada en Barcelona, recuerda con cariño y emoción su paso por El Eslabón en sus inicios.